Tratamiento de la otitis media crónica

Escrito por:

Dr. Guillermo Til Pérez

Otorrino

Publicado el: 21/01/2016
Editado por:


Una de las posibles patologías que puede sufrir nuestro oído es la otitis media, es decir, una inflamación del oído medio. La causa de este problema puede ser debido a un resfriado, alergia o infección de las vías respiratorias superiores provocados por bacterias o virus. Los síntomas debido a la acumulación de pus o moco en esta parte del oído son dolor intenso e hinchazón.

 

En qué consiste una timpanoplastia

La cirugía del oído medio, intervención también llamada en Otorrinolaringología timpanoplastia, es la técnica empleada para tratar el origen y las secuelas de la otitis media crónica. En dicho procedimiento se realiza una limpieza de la cavidad timpánica (se ventila) y se realiza una reconstrucción de la membrana timpánica y si es posible, de la cadena de huesecillos.

 

Resultados de la timpanoplastia

Si la técnica realizada es correcta y el paciente cumple todas las indicaciones del médico, es de esperar que se produzca una mejoría de la audición, que el paciente tenga la posibilidad de mojar el oído y se eviten los cuadros de supuración.

 

Una de las posibles patologías que puede sufrir nuestro oído es la otitis media

 

Riesgos de una timpanoplastia

En general, las complicaciones son poco frecuentes. Si se ha realizado un corte por detrás del pabellón auricular, puede aparecer de una manera transitoria o definitiva, un cierto adormecimiento o acorchamiento de dicho pabellón auricular. A pesar de realizar una técnica impecable cabe la posibilidad de que la perforación timpánica no se cierre, aparezcan acúfenos (ruidos en los oídos), vértigos y / o que se agrave la pérdida de la audición. En caso de empleo de prótesis, cabe la posibilidad de que se produzca rechazo. 

Como en cualquier cirugía cabe la posibilidad de aparición de las complicaciones propias de toda intervención quirúrgica y las relacionadas con la anestesia general.

 

Recomendaciones antes y después de la intervención

El paciente debe permanecer en reposo domiciliario los tres primeros días después de la intervención y evitar esfuerzos físicos como levantar pesos. No debe conducir ningún tipo de vehículos ni puede utilizar maquinaria peligrosa hasta pasadas 72 horas desde la intervención. En caso de dolor al masticar evitar comer alimentos duros. En ningún caso se debe mojar el oído ni lavar la cabeza hasta que su médico lo autorice. Es posible que el paciente llegue a tener cierta sensación de mareo de forma leve o zumbido moderado. Es habitual que no disponga de una audición perfecta o resonancia de su propia voz.

Es aconsejable que efectúe los movimientos de cabeza suavemente, sin acciones bruscas, sobretodo al levantarse y acostarse. Estornude sin taparse la nariz y con la boca abierta, si desea sonarse la nariz, hágalo con delicadeza y de un lado cada vez.

Ante cualquier alteración o anomalía descritas anteriormente, debe consultar siempre con su médico.

Pide cita con un especialista