¿Son compatibles los dispositivos intracardiacos y el deporte?
Escrito por:
Cardióloga
Publicado el: 26/06/2020
Editado por: Albert González
A pesar de que, en ningún caso, la indicación primaria para el implante de un marcapasos o un desfibrilador implantable (DAI) puede ser la intención de continuar haciendo deporte, su práctica no es incompatible.
Está demostrado que el deporte tiene amplios beneficios a nivel psicosocial que favorecen a la calidad de vida en general y, en particular, a la de individuos con alguna afectación cardiovascular. Uno de los principales beneficios de la rehabilitación cardíaca es la disminución de síntomas de ansiedad y depresión. Además, existen pruebas suficientes que demuestran que la realización de una actividad física moderada puede ser beneficiosa para los portadores de estos dispositivos intracardiacos. Si bien no todos los deportes estarían recomendados, no se puede ni debe establecer una prohibición general y absoluta. Es clave adaptar cada situación, siguiendo unos principios generales.
Actividad física general
Generalmente, las personas que llevan marcapasos no tienen ninguna restricción para la práctica deportiva, excepto en los deportes que existe riesgo de colisión. Algunos deportistas son “dependientes de marcapasos”, lo que constituiría una contraindicación formal. Excepto este supuesto, resto de portadores de marcapasos deben tener conocimiento de los riesgos y, en caso de asumirlos, es conveniente equiparse con medios de protección diseñados para la amortiguación de posibles golpes.
En cambio, en pacientes portadores de DAI, la seguridad no está tan clara, según unas recomendaciones de la American Heart Association and American College of Cardiology en 2005. Estas recomendaciones alertaban sobre posible aumento del riesgo de arritmias asociadas a la actividad física vigorosa, con restricciones a su realización.
Aunque no es lo recomensable, es posible practicar deporte con marcapasos.
Todo paciente portador de marcapasos o desfibrilador debe de ir siempre provisto del carnet europeo que les identifica. En el hospital, además de dicho carnet, se les entrega una guía con las peculiaridades de su dispositivo, recomendaciones y precauciones. Es un documento que deben leer y conocer.
Los pacientes portadores de un DAI deben esperar seis semanas tras el implante o tras recibir una descarga para reanudar su actividad física.