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Autore:El peeling químico es un procedimiento médico que consiste en la aplicación de un agente químico, consiguiendo una exfoliación de forma acelerada. Actualmente constituye uno de los tratamientos dermatológicos más demandados por sus múltiples efectos, siendo el más destacado el rejuvenecimiento facial. Aunque no elimina en su totalidad arrugas de expresión o pliegues profundos, consigue estimular la proliferación epidérmica; De esta manera, mejora el aspecto de las arrugas finas, así como la textura y coloración de la piel.
¿Qué tipos de peeling químico existen?
Tras analizar las necesidades de la piel en cada caso, se orienta al paciente y se decide cuál es el peeling químico más adecuado a sus necesidades. Las principales necesidades que encontramos son el rejuvenecimiento facial, combatir manchas o acné y sus cicatrices y, en algunos casos, incluso como tratamiento de preparación para otro tipo de tratamientos estéticos, potenciando sus efectos.
Los peelings pueden ser superficiales, medios o profundos. De este modo se utilizan unos productos u otros dependiendo de la intensidad de exfoliación que el paciente quiera obtener.
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productos u otros dependiendo de la intensidad de exfoliación que el paciente quiera obtener.
1. Peeling químico superficial
Los peelings más superficiales se realizan con Ácido Salicílico, Ácido Mandélico o Ácido Láctico. Este tipo de peeling consigue una suave descamación al cabo de unos días. De esta manera, la paciente puede continuar con su actividad diaria con normalidad.
2. Peeling químico medio
Los peelings medios con Tricloroacético, Retinol o Pirúvico consiguen una descamación más evidente, actuando sobre la epidermis y dermis más superficial.
3. Peeling químico profundo
Los peelings profundos eliminan la capa superficial y dermis profunda. Son mucho más agresivos, por lo que el postratamiento requiere cuidados médicos más intensos y limitan la actividad social durante unos días.
¿Cómo es el procedimiento habitual?
Para empezar, es necesario realizar el desengrasado de la piel. Debe ser meticuloso, eliminando restos de grasa y escamas. De esta forma la penetración de los ingredientes será homogénea. Además, tendremos en cuenta el tipo de agente químico a utilizar para controlar así el tiempo de exposición. Durante este proceso de descamación, hay que prestar especial cuidado a la piel, que no puede ser pellizcada o estirada por riesgo de hiperpigmentación.
Es importante destacar que los 5-7 días anteriores al tratamiento se deben evitar procedimientos irritativos como: limpieza de cutis, peelings mecánicos, depilación con cera o aplicación de tintes. Así mismo, debemos tener especial cuidado los días posteriores, indicando el uso de cremas hidratantes adecuadas y evitando la exposición solar.
Por ello, destacamos la utilización de peelings como complemento a otros tratamientos de medicina estética como serian: IPL, mesoterapia, rellenos… potenciando los resultados y consiguiendo el efecto de rejuvenecimiento deseado.