Conociendo las lesiones del manguito rotador

Autore: Dr. Francesc Soler Romagosa
Pubblicato:
Editor: Top Doctors®

El Dr. Soler Romagosa es miembro del grupo TraumaAdvance. Experto en el tratamiento de patología articular de rodilla y de hombro, es un reconocido traumatólogo referente en lesiones deportivas y laborales. Además, también es un referente en terapias regenerativas y en la aplicación de plasma rico en plaquetas y terapia celular. El manguito rotador (también se puede hablar de cofia rotadora) es un conjunto de tendones que rodean por delante, por encima y por detrás la cabeza humeral, y que unen dicha cabeza con la principal musculatura responsable del movimiento del hombro.

 

El tendón más fragil

Los tendones que forman parte del manguito rotador son el tendón subescapular (por delante de la cabeza humeral), el tendón supraespinoso (por encima de la cabeza humeral), y los tendones ingraespinoso, redondo mayor y redondo menor (por detrás de la cabeza humeral). El que se lesiona más frecuentemente es el tendón supraespinoso, responsable de elevar el brazo hacia arriba.

 

Tipos de lesiones

Las 2 lesiones principales que pueden afectar a los tendones del manguito rotador son la inflamación (tendinitis) o la rotura tendinosa. Las tendinitis se producen por una sobrecarga mantenida del tendón (por ejemplo trabajos repetitivos con el brazo elevado, levantar pesos frecuentemente...) o bien por un movimiento brusco del brazo en el momento de realizar un esfuerzo o por una caída. Las roturas tendinosas se producen después de un tirón brusco del brazo realizando un esfuerzo o al caerse, o bien en personas mayores por el mismo proceso degenerativo del tejido tendinoso, que se acaba rompiendo sin necesidad de un traumatismo importante.

Las 2 lesiones principales que pueden afectar a los tendones del manguito rotador son la inflamación (tendinitis) o la rotura tendinosa
 

¿Cuándo acudir al especialista?

El paciente con una tendinitis suele acudir a la consulta por presentar dolor en el hombro de semanas o meses de evolución, no recordando en muchas ocasiones la causa del mismo. El dolor va limitando progresivamente la capacidad de realizar actividades normales en su vida diaria (cargar la compra, introducir el ticket del peaje o del parking, realizar determinadas activiades deportivas, ...). El dolor puede ser de predominio nocturno (llega a despertar a los pacientes), creando una gran incomodidad.  Las roturas del manguito rotador también pueden presentarse de la misma manera (dolor en el hombro de tiempo de evolución, por las noches, ...), pero con la diferencia que en el momento de realizar un esfuerzo con el brazo hay una importante pérdida de fuerza e imposibilidad de hacerlo, debido a la lesión tendinosa. Igualmente, suele haber un traumatismo claro a partir del cual empieza el dolor y el déficit funcional.

 

La lesión tendinosa la intuiremos por la exploración física del paciente (hay una serie de maniobras exploratorias que nos orientan hacia una tendinitis o una rotura del tendón). La prueba de imagen más específica para confirmar dichas lesiones es la resonancia magnética.

 

Diferentes tratamientos según la patología

El tratamiento de las tendinitis del manguito rotador será inicialmente conservador: Según el tiempo de evolución, se puede pautar tratamiento médico con antiinflamatorios, remetir el paciente para una pauta de rehabilitación, o si el proceso es más evolucionado o bien han fracasado los tratamientos previos, se puede realizar una infiltración con un derivado de la cortisona. El tratamiento de las roturas tendinosas será mayoritariemente quirúrgico, de manera que se volverá a insertar el tendón roto en su sitio de origen anatómico. Actualmente esta intervención se realiza mediante la técnica artroscópica, y los resultados son muy satisfactorios, mejorando progresivamente el dolor y la funcionalidad del hombro hasta su total normalización.

 

Pero hay que tener en cuenta que no todas las roturas del manguito rotador se tienen que operar: Es frecuente ver en pacientes mayores roturas de largo tiempo de evolución, pero que son muy bien toleradas, no causando dolor ni déficit funcional. Estas roturas se caracterizan por tener un tendón muy degenerado y retraido, por lo que dificilmente operándolo lo podremos reinsertar en su sitio de origen. Cuando estos pacientes sufren un traumatismo o tirón del hombro, aparece un importante déficit de movilidad de esta articulación por la descompensación que provoca el dolor, poniendo de manifiesto la rotura crónica. En estos casos optaremos por realizar tratamientos conservadores (recuperación, infiltraciones) para disminuir el dolor y recuperar la funcionalidad articular.

*Tradotto con Google Translator. Preghiamo ci scusi per ogni imperfezione

Dr. Francesc Soler Romagosa
Traumatologia

*Tradotto con Google Translator. Preghiamo ci scusi per ogni imperfezione

Vedi il profilo

Valutazione generale del paziente


  • Altri trattamenti d'interesse
  • Bio-stimolazione con plasma ricco di piastrine
    Ozonoterapia
    Paralisi facciale
    Dolore neuropatico
    Gomito
    Epicondilite (gomito del tennista)
    Dolore al gomito
    Compressione nervosa al gomito
    Compressione del nervo mediano
    Compressione del nervo radiale
    Questo sito web utilizza cookie propri e di terze parti per raccogliere informazioni al fine di migliorare i nostri servizi, per mostrarle la pubblicità relativa alle sue preferenze, nonché analizzare le sue abitudini di navigazione. L'utente ha la possibilità di configurare le proprie preferenze QUI.