Sobrepeso y agotamiento celular

Sobrepeso y agotamiento son dos palabras que van juntas sin lugar a dudas.

La sobrecarga, acarrear cada día más kilos de los necesarios, no siempre es indicativo de buena alimentación, comer mucho no es lo mismo que comer bien y genera unos desajustes en el funcionamiento del cuerpo humano que a veces pasan factura a medio y largo plazo, no de manera inmediata.

Comer de más casi siempre indica “mal comer”, no tomar las cantidades de frutas y verduras recomendadas para garantizar el aporte de vitaminas y minerales que necesita el organismo para que el motor y la zona en donde se produce la energía de sus células (núcleo y mitocondrias), o consumir más harinas de mala calidad o más proteínas cuyo origen a veces no es el más saludable, de alguna manera provoca que “ensuciemos” el terreno metabólico, el lugar en donde se produce la energía que necesitamos para estar en marcha de manera efectiva y placentera.

La vida desorganizada influye en el sobrepeso

Hay que tener en cuenta que el sobrepeso suele ir relacionado con vidas estresadas (falta de organización, improvisación, dietas de moda…), enfermedades inflamatorias de base con sus consecuencias metabólicas según los fármacos que estén tomando, etc…se llega al “agotamiento celular”.

El hecho de mantener un terreno “sucio” o desequilibrado hace que a la larga notemos esa sensación de fatiga “de fondo”, dormir ya no nos genera una reparación del trabajo realizado a lo largo de la jornada y poco a poco las mitocondrias, autentica zona de producción de energía ya no funcionan bien.

En condiciones normales las mitocondrias producen energía tras la combustión de grasas, hidratos de carbono y proteínas con la ayuda de las vitaminas y minerales suficientes. Sin suficiente producción de energía aparece la fatiga, el cansancio. Dormir más no ayuda, comer mejor si.

Garantizar el aporte adecuado de nutrientes en diferentes etapas

Lo primero será, como en las cosechas, limpiar el terreno, luego abonar y después sembrar. Es decir, reiniciar con la supervisión de un experto en Nutrición un plan de dieta saludable de entrada sin excesos y con alimentos de buena calidad y después suplementar, sobre todo garantizando no excedernos en las dosis, valorando sobre todo los niveles de Coencima Q10.