¿Qué hacer con los embriones sobrantes?

Para dar una oportunidad de vida a los embriones abandonados, Institut Marquès inició el primer programa de adopción de embriones del mundo, gracias al cual han nacido más de 1.000 bebés desde 2004. Los pacientes que finalizan los ciclos de reproducción asistida pueden tomar la decisión final sobre el destino que quieren dar a sus embriones sobrantes. Estos tienen la posibilidad de optar por conservarlos asumiendo el coste de preservación, donarlos a la investigación o a otras parejas o destruirlos. Pese a todo, 6 de cada 10, no se deciden por ninguna de ellas y optan por dejar la decisión en manos del centro médico.

Embriones restantes: una cuestión complicada

Los motivos por los cuales los pacientes de forma mayoritaria dejan la decisión sobre el futuro de sus embriones en manos de la clínica no responden a una actitud irresponsable. Más bien a las implicaciones emocionales que conlleva esta decisión: donarlos a otras parejas les provoca miedo a que sus hijos se encuentren con hermanos; por otro lado destruirlos les da pena y donarlos a la investigación les genera inquietud sobre lo que se pueda hacer con ellos. La Dra. Marisa López-Teijón explica que: “Muchos pacientes nos manifiestan esta indecisión y nos piden que seamos nosotros los que elijamos por ellos la mejor opción. Así, nos encontramos con cientos de embriones congelados cuyo destino debemos decidir los centros de reproducción asistida. En este caso, optamos por compartir con la sociedad esta responsabilidad que nos confiaron los pacientes, poniendo en marcha el primer programa de adopción de embriones del mundo. Es un proceso realmente emocionante, lleno de ilusión y de esperanza, ya que representa el logro de haber encontrado un nuevo destino al embrión”.

¿Cuál es el perfil de los adoptantes?

Durante los 14 años de vida del programa, pacientes de 124 nacionalidades distintas han acudido a los centros de Institut Marquès. El 72% de los pacientes que solicitan adopción de embriones lo hacen por motivos relacionados con la esterilidad (envejecimiento ovárico, infertilidad masculina severa o fallos previos en técnicas de reproducción). Se tratan de parejas que han intentado sin éxito otros métodos, promediando más de 4 años deseando tener un bebé y con 4,4 intentos fallidos. Seis de cada diez adoptantes de embriones ya había abandonado los tratamientos y habían renunciado a ser padres.

¿Cómo se realiza la adopción de embriones?

La adopción de embriones no requiere hacer trámites oficiales de adopción, sino únicamente firmar un consentimiento en el que la pareja o mujer que adoptará reconocen explícitamente su conocimiento del proceso. En el Institut Marquès, la asignación de los embriones se elabora a través de un sistema informático que certifica que cada niño nazca en un país o en una comunidad autónoma diferentes al de los otros embriones resultantes del mismo tratamiento. Así se podrán evitar consanguinidades futuras. Desde el inicio de este programa en 2004, la tasa de supervivencia embrionaria tras la descongelación ha ido aumentando gracias a la vitrificación. La tasa media de embarazo global es del 43% por ciclo, también ha ido mejorando cada año, y desde 2013 supera el 50% por ciclo.