Otosclerosis: qué es y qué riesgos tienen las embarazadas que sufren esta enfermedad
Autore:La otosclerosis es una osteodistrofia de la cápsula del laberinto, es decir, una enfermedad del oído que afecta a un huesecillo de la cadena osicular del oído al que denominamos estribo, provocando su obliteración y pérdida de movimiento y ocasionando una alteración en la transmisión del sonido y, por tanto, una sordera.
¿Qué pruebas se deben realizar para diagnosticarla?
Para el diagnóstico, en el examen del oído, la otoscopia, debe ser normal. Se acompaña de una hipoacusia o sordera cuando las frecuencias más afectadas son las graves, o de transmisión, que es una sordera con unas características especiales que nos indican que la hipoacusia se debe a un trastorno en la transmisión del sonido por alteración de la cadena osicular.
También puede existir un componente hereditario donde varios miembros de la familia padecen esta enfermedad.
¿Cuáles son los diferentes tratamientos que existen para corregir los síntomas?
Dentro de los tratamientos para mejorar la audición en esta enfermedad tenemos:
- La utilización de audífonos, que amplifican el sonido en el oído y mejoran la audición. Tienen la ventaja de no tener contraindicaciones y no supone riesgos. Como inconvenientes solo la dependencia a un aparato.
- También existe la posibilidad de una intervención quirúrgica (estapedectomía) que consiste en la extirpación del estribo (huesecillo que está bloqueado) y la colocación de una prótesis que permita la transmisión del sonido. Los resultados son bastante buenos con una recuperación de la audición bastante aceptable. Tiene el inconveniente de existir un porcentaje muy pequeño que no recupera la audición.
¿Será necesario hacer uso de audífonos?
Si se decide por la operación quirúrgica para el tratamiento de la enfermedad, por lo general, no precisa de audífonos ni ninguna otra precaución (le puede entrar agua en el oído y hacer una vida normal).
¿Hay un mayor riesgo de sordera si una mujer con otosclerosis se queda embarazada?
La otosclerosis discurre con una evolución progresiva en el tiempo presentando fases de reagudización con fases de quiescencia.
Cuando afecta a mujeres puede presentar exacerbaciones con los cambios hormonales, como los que se experimentan durante el embarazo, empeorando la audición en esas circunstancias.