Las terapias biológicas como tratamiento para las enfermedades inflamatorias

Algunas enfermedades como la Artritis Reumatoide, la familia de las Espondiloartritis y la Artritis psoriásica, se originan por una respuesta inmune anormal y exagerada del organismo, liberando sustancias responsables de la inflamación.

Cada vez hay más información sobre este tipo de enfermedades y, como consecuencia, han ido apareciendo nuevos tratamientos para el control de estas enfermedades.

En qué consisten las terapias biológicas

La palabra Biológico hace honor al proceso de elaboración y a su tipo de síntesis. En los últimos años han aumentado el número de terapias biológicas frente a distintas dianas, todas ellas sustancias pro-inflamatorias que originan la inflación y destrucción de las articulaciones en estas enfermedades.

La elección de un tratamiento u otro dependerá del tipo de enfermedad, de las características de esta, de otras comorbilidades (enfermedades asociadas) del paciente y del tipo de vida, siempre aplicado por expertos en Reumatología.

¿Cuándo necesitaré las terapias biológicas?

Las terapias biológicas serán necesarias cuando la enfermedad siga activa a pesar de haber suministrado tratamientos modificadores de la enfermedad convencionales (metotrexato, Leflunomida, hidroxicloroquina, sulfasalazina, etc), o bien existan contraindicaciones o intolerancias a estos.

¿Qué problemas pueden comportar las terapias biológicas?

Estas terapias biológicas son seguras y eficaces en el control de la enfermedad. Esto se ha demostrado en distintos ensayos clínicos.

No obstante, el mecanismo de acción de estos tratamientos puede reducir la capacidad para hacer frente a infecciones cotidianas o despertar infecciones que pueden estar silentes en nuestro organismo. Por ello, antes de empezar el tratamiento, es necesario realizar algunas pruebas, actualizar el calendario de vacunas y su médico le debe aconsejar personalmente sobre que vacunas debe administrarse y cuales no.

Como con todos los tratamientos puede haber problemas de tolerancia o alergia. Por todo ello, mientras esté con estos tratamientos seguirá controles clínicos y analíticos de forma periódica y acudir a las consultas concertadas con su Reumatólogo.