La revolución de la ortodoncia en la infancia: los alineadores invisibles

La ortodoncia convencional siempre se ha mostrado rechazada por los pacientes que necesitan tratamientos para corregir la maloclusión dental. Por este motivo, los alineadores invisibles han revolucionado la demanda de corrección dental.

Una mala oclusión dental muy a menudo es sinónimo de complejos. Por lo tanto, si se observan dientes desviados, apiñados, sobresalidos o las piezas dentales superiores no encajan con las inferiores en la mordida, es necesario consultar a un especialista en Odontología para que el diagnóstico se trate de forma temprana.

¿En qué consiste la ortodoncia invisible en niños?

La ortodoncia invisible se caracteriza por ser un sistema computerizado de última generación, donde el movimiento dental se basa en una programación digital que el ortodoncista dedica durante horas a cada paciente y que se aplica directamente a cada aparato, según concreta Silvia Jiménez, doctora experta en ortodoncia de la clínica Ciro. Este sistema se basa en la aplicación de pequeños moldes llamados alineadores que son completamente transparentes, cómodos y muy estéticos.

El tratamiento es ideal para los niños a partir de los 6 años, puesto que ofrece una serie de ventajas que los sistemas convencionales no pueden ofrecer: una ortodoncia sin caries, cómoda, práctica y estéticamente casi invisible.

Por ello, la clínica Ciro considera que la ortodoncia transparente es la ortodoncia del siglo XXII y pone especial énfasis en que el ortodoncista seleccionado será fundamental para que el resultado sea el óptimo.

¿A partir de qué edad se puede poner?

Es totalmente eficaz a cualquier edad. Aun así, una ortodoncia realizada a edad temprana, siempre que sea necesario, es lo ideal, porque el hueso es más blando y aún no ha llegado a osificarse de todo. En la edad adulta nos podemos encontrar con más limitaciones.

En general, los tratamientos de ortodoncia se pueden diagnosticar siempre y cuando las condiciones de salud de hueso y periodontales (el estado de las encías) sean las adecuadas. Una ortodoncia que se haya iniciado con un problema de encía y un hueso activo e incontrolado puede provocar la pérdida y caída de los dientes a corto plazo.

¿En qué casos no son recomendables los alineadores en niños?

A la hora de planificar los tratamientos, se tiene en especial cuidado a los pacientes adultos, ya que hay ciertos movimientos que sabemos que pueden ser muy perjudiciales, sobre todo en pacientes que han perdido hueso de forma natural o tienen problemas de encías, como consecuencia de la edad.

Por estos motivos, la directora del departamento de ortodoncia de la clínica Ciro comenta la importancia que tiene trabajar con un equipo multidisciplinar altamente cualificado.

¿Cuáles son las fases del tratamiento?

La confección de los aparatos comienza con la realización de un estudio fotográfico y un escaneado digital de la boca del paciente. Posteriormente, se realiza un diagnóstico exhaustivo y una programación personalizada por parte de Ortodoncistas con la finalidad de poder mover los dientes virtualmente (3D). De esta manera, se puede obtener el resultado final deseado.

Los aparatos de ortodoncia transparente deben llevarse 22 horas al día durante una semana. Cada semana pasará a cambiarse de aparato y así sucesivamente hasta el final del tratamiento. En caso de saltarse alguna semana, el paciente puede recuperarla posponiendo los cambios de toda la secuencia de aparatos. Y, durante el tratamiento de ortodoncia, el paciente debe de visitar al dentista cada mes y medio o cada dos meses.

Como durante cualquier tratamiento de ortodoncia, los cuidados bucales siempre deben ser más minuciosos. Por ello, se recomienda:

• No colocar los aparatos con restos de comida en los dientes, sin un previo cepillado.
• Evitar bebidas azucaradas, así como cualquier tipo de comida con el aparato puesto.
• No fumar con el aparato en la boca, ya que el material absorbe mucho la nicotina y tiñe mucho los plásticos.

Todo lo demás, es 100 × 100 compatible con este tipo de sistemas transparentes, incluso el deporte.

¿Qué ventajas ofrece? ¿Tiene algún inconveniente para los niños?

La gran ventaja de la ortodoncia invisible, en relación a la aparatología convencional multibrackets es que, al ser removible, permite ponérselo y quitárselo sin dificultad, el resultado estético es muy bueno y no altera el habla.

Por otro lado, al ser de plástico, evitamos los dolores típicos de los aparatos convencionales y las rozaduras.  

En la clínica dental Ciro, la Dra. Silvia Jiménez, especialista en este tipo de sistema, explica que, dentro del sistema de ortodoncia invisible, las limitaciones para tratar cualquier maloclusión con este tipo de aparatos, son mínimas.

¿Qué pautas deben seguir los niños en su vida diaria?

Es importante que los pacientes sean conscientes de que los dientes son seres vivos que tienen memoria y, en ocasiones, tienden a recidivar.  Por ello, desde Ciro se enfatiza que la retención forma parte su vida diaria y del tratamiento de ortodoncia, siendo igual de importante e incluso más que el tratamiento en sí.

Una buena práctica para la vida diaria del paciente que realiza este tipo de tratamiento es dormir con un retenedor superior y otro inferior durante, como mínimo, los cinco primeros años después de una ortodoncia, en edad infantil, hasta que el hueso haya finalizado su osificación.

En edad adulta, como el hueso ya está osificado, la tendencia a la recidiva siempre es mayor que a edad infantil. Eso supone que el paciente deberá de dormir con un aparato de retención cuantos más años mejor.

Dormir con un aparato que proteja el diente siempre va a evitar que el paciente desgaste el esmalte.  Si el paciente tiende a apretar mucho los dientes, se recomienda que duerma con una férula de descarga, que sirve de retención y evita que se contraiga tanto la musculatura facial.