Consejos para una piel radiante en invierno

Habitualmente, se piensa que la piel hay que cuidarla especialmente en verano con el fin de paliar los posibles daños debidos a la alta radiación solar. Esto es cierto, pero es importante destacar que no es sólo en verano cuando hay que mimar más la piel.

Durante los meses fríos del año la piel se deshidrata, alterando la barrera de protección que posee y volviéndola más vulnerable a las bajas temperaturas, la calefacción y el viento. Por ello, en invierno hay que tener especial cuidado con la piel.

Qué hacer para mantener la piel sana

• La comida es un factor de gran influencia en el envejecimiento y el estado de la piel, por lo que se recomienda llevar una dieta sana y equilibrada, consumiendo antioxidantes naturales.
• El deporte elimina el estrés y las toxinas, y combate el efecto antiinflamatorio, mejorando el riego sanguíneo. Por esto, hacer ejercicio es muy importante.

• Establecer una rutina de limpieza de la piel mañanas y noches con el producto que mejor convenga en función de las características de la piel.
• Exfoliar la piel dos veces por semana para activarla y renovarla.
• Llevar un tratamiento de hidratación que se corresponda con las necesidades de la piel de cada uno.
• Aunque en invierno predominen los días nublados, también hay que protegerse del sol aplicando protección solar media hora antes de salir y retocar cada dos horas si se sigue al aire libre.

Los mejores tratamientos dermatológicos para el invierno

Las vitaminas A, C y E contienen moléculas cuya efectividad está demostrada científicamente. Para que la efectividad sea total, deben ser productos con altas concentraciones que únicamente se prescriben en consultas médicas por especialistas en Dermatología o Medicina Estética.

Tratamientos clínicos para mejorar el estado de la piel

Durante los meses de invierno las personas pueden someterse a tratamientos de revitalización de la piel para complementar con la rutina diaria: luz pulsada y peelings.