¿Conoces las terapias regenerativas?
Autore:Las terapias regenerativas se basan en la utilización del propio cuerpo como fuente para la curación.
¿Tan efectivas son las terapias con células madre?
La mayoría de los tejidos del cuerpo tienen una capacidad regenerativa que les permite recuperarse de lesiones a partir de la producción de un tejido nuevo, similar al que había anteriormente. Pese a esto, en muchas ocasiones esta recuperación no se produce y la lesión se convierte en crónica o se sustituye por una cicatriz de tejido fibroso que altera su función.
Además de esta cuestión, en muchas lesiones también nos podemos enfrentar con ritmos de recuperación muy lentos o reparaciones débiles que propician una nueva rotura o una alteración de la función. Un claro ejemplo son lesiones como la epicondilitis, lesiones del manguito rotador o del cartílago de la rodilla.
La terapia con células madre puede ser un tratamiento milagroso para esta clase de lesiones, pero es importante hacer una serie de aclaraciones. Efectivamente existen esta clase de terapias, pero se encuentran en fase de investigación y tienen un coste muy elevado, además de la agresividad para obtener el producto y aplicarlo.
Por lo tanto, las terapias que la gente denomina de forma vulgar con “células madre”, son otro tipo de terapias que pueden dividirse en:
- Plasma Rico en Plaquetas
- Productos derivados de la grasa autóloga
- Sueros condicionados autólogos
- Cultivos e implantes celulares antólogos
En ningún caso se puede garantizar el éxito del tratamiento que dependerá de la capacidad de respuesta de la persona. En cualquier caso, en todos ellos se debe conseguir un tejido del propio paciente para implantar en la zona lesionada.
Plasma Rico en Plaquetas
El procedimiento, que se realiza en quirófano o en un laboratorio, también se conoce como PRP o Factores de Crecimiento.
Empleado para tratar el dolor o regenerar tejidos, el PRP se obtiene de centrifugar la sangre del propio paciente y seleccionar la capa que contiene las plaquetas, para a continuación inyectarla en la zona a trata, previamente activada con cloruro calcio u otros métodos. Dichas plaquetas liberan factores de crecimiento que propician la regeneración local.
Células progenitoras de la grasa autóloga
En esta técnica se requiere la extracción de grasa de la cadera o abdominal a través de una lipoaspiración, realizada con sedación o anestesia local. Una vez se obtiene, se trata para eliminar los adipocitos y seleccionar el tejido estromal, en el que se encuentran las células madre.
El producto final se aplica a través de una inyección en la zona lesionada a tratar.
Suero condicionado autólogo
Con un procedimiento parecido al Plasma Rico en Plaquetas, en este caso la sangre se pone previamente en contacto con unas bolitas de cristal a 37 grados durante 6 o 8 horas, para posteriormente centrifugarla y obtener suero, que se congela a -18 grados.
El cristal que contacta con la sangre produce una respuesta de las propias células que liberan sustancias antinflamatorias autólogas y múltiples factores de crecimiento.
La inyección se realiza en consulta con un filtro específico, para que esa un suero sin células y rico en proteínas.
Cultivos celulares o tisulares
Podemos obtener células de estirpe ósea, fibrosa, cartilaginosa, dérmica, muscular y de otros tejidos, que posteriormente se implantan en las zonas lesionadas, ya sea mediante cultivo o de forma directa. Dicha aplicación esta ampliamente estudiada y tiene unos resultados contrastados para ciertas lesiones.
Asimismo, también es posible obtener células madre progenitoras capaces de diferenciarse a cualquier otro tejido. Dichas células se consiguen de forma primaria en escasa cantidad, por lo que generalmente se cultivan antes de su implantación. Estas terapias tienen riesgos potencias y todavía están en fase de investigación.
Para más información acerca de terapias regenerativas, contacte con un especialista en Traumatología.
