¿Conoces el Síndrome de Dravet?
Autore:En Podología Infantil podemos ayudar a aquellos pacientes que padecen la enfermedad poco común del Síndrome de Dravet. Los niños con esta patología se caracterizan por tener un deterioro progresivo de la marcha, especialmente durante la segunda década de la vida. En este momento podemos identificar:
- Marcha agachada
- Escoliosis
- Torsión tibial externa
- Pies valgos
Asimismo, su encefalopatía epiléptica causada a mutaciones del gen que codifica la subunidad α1 del canal de sodio, SCN1A, en más del 70% de los pacientes.

Los primeros 5 años
En este periodo inicial, las convulsiones son más severas y recurrentes, con una desaceleración del desarrollo. En cualquier caso, los déficits motores se deben valorar también en las siguientes etapas.
Los test de fuerza no son sencillos de realizar por las limitaciones cognitivas, pero presumiblemente existen déficits. Además, presentan hiperlaxitud ligamentosa que, unido con la probable alteración sensitivo-motora, contribuyen a las disfunciones biomecánicas existentes.
El papel del podólogo
Existen diferentes factores que pueden facilitar la marcha agachada, con el objetivo de equilibrar el centro de gravedad. El especialista puede intervenir, proporcionando plantillas para favorecer la estabilidad del pie.
Con dicha estabilidad, se controlarán los ejes de movimiento y se dará soporte a las estructuras de estabilidad pasiva, tales como la capsula articular y los ligamentos.
También se debe valorar la hiperlaxitud ligamentosa, habitual en la mayor parte de casos, puesto que no beneficia a dicha estabilidad, complicando la motricidad.
En definitiva, la valoración del rango de amplitud articular y mecánica, además de la valoración de las alteraciones sensitivo motoras, es fundamental para conseguir que el trabajo entre fisioterapias, podólogos y terapeutas ocupaciones sea lo más eficaz posible, reduciendo las limitaciones al máximo.