Síndrome de sensibilización central

La sensibilización central es un mecanismo de alteración del sistema nervioso central debida a una lesión o agresión continua y progresiva que provoca la sensibilidad central: una disfunción de la neuroregulación del sistema nervioso. Así, la sensibilización sería el proceso o mecanismo causal, mientras la sensibilidad sería la consecuencia en forma de síntomas.

La sensibilizacion y la sensibilidad central conciernen al sistema nervioso central, que es la sección que va desde la médula hasta todas las terminaciones nerviosas del sistema periférico, músculos y articulaciones.

Enfermedades de la sensibilidad central

Existen múltiples enfermedades implicadas en el mecanismo de sensibilidad central, entre ellas las migrañas, el colon irritable, los acúfenos,el Síndrome de Piernas Inquietas, la dismenorrea, el síndrome temporo-mandibular o la vejiga irritable. Pero las más destacables por su complejidad y sintomatología son cuatro:

1. Fibromialgia
2. Síndrome de fatiga crónica
3. Sensibilidad Química Múltiple
4. Sensibilidad Electromagnética

Causas de la sensibilidad central

Debido a la multiplicidad de enfermedades y la complejidad del sistema nervioso central, también existe multitud de causas para estas patologías. Entre ellas, podemos destacar 6 grupos principales:

1. Causas genéticas: esta relación causal se ha observado especialmente con la fibromialgia.
2. Infecciones: se ha estudiado que el Síndrome de Fatiga Crónica podría venir causado por algunos tipos de virus, que se mantienen en el organismo incluso cuando no existen síntomas de enfermedad. Por ejemplo, el virus del herpes podría provocar este estado de fatiga post-viral.
3. Traumatismos: un traumatismo grave, por ejemplo aquellos debidos a un accidente de tráfico, o un latigazo cervical pueden dar lugar a estas patologías. Es importante preguntar al paciente si ha sufrido un traumatismo grave recientemente.
4. Enfermedades y tratamientos: también existen diversos grupos de enfermedades que pueden variar o desembocar en una patología de sensibilidad central. Las enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide, la artrosis o el lupus eritematoso guardan una estrecha relación causal con la fibromialgia, y viceversa. Asimismo, la fibromialgia y el síndrome de fatiga crónica también suelen darse como consecuencia a una enfermedad inflamatoria como la Enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa. Por último, se ha observado que la fatiga y el dolor fibromiálgico también pueden obedecer a síntomas de un proceso oncológico como síntomas paraneoplásicos, es decir, que acompañan un cáncer.
5. Exposición a tóxicos: la exposición a tóxicos o la intoxicación pueden dar lugar a un problema de sensibilidad central. En este punto es importante diferenciar este proceso con las alergias, siendo estas la enfermedad provocada cada vez que se expone a un agente alérgeno, mientras la sensibilidad central es la enfermedad que se produce por la exposición continuada a un tóxico. Así, la sensibilización se producirá tras la exposición continuada muchas veces en el tiempo a un determinado tóxico. Estrés: el estrés emocional mantenido en el tiempo presenta efectos nocivos para la salud, como el aumento del riesgo cardiovascular o de enfermedades digestivas y neurológicas. Pero también favorece la aparición de la fatiga.
6. Campos magnéticos: esta es la causa que se ha observado más recientemente. La exposición repetida a campos magnéticos puede provocar sensibilización central, y no sólo los campos de alta intensidad como líneas de alta tensión y antenas de edificios, sino también los campos domésticos como los teléfonos móviles, routers de internet o despertadores.

8 síntomas de la sensibilidad central

La complejidad de las enfermedades de sensibilidad central (fibromialgia, síndrome de fatiga crónica, Sensibilidad Química Múltiple y Sensibilidad Electromagnética) conlleva a que presenten una amplia sintomatología, que afecta en mayor o menor grado en función del paciente. A continuación se resume la sintomatología en 8 grandes grupos:

1. Dolor: es el síntoma que más caracteriza al Síndrome de la Sensibilidad Central. Se trata de un dolor neuropático, es decir, que se genera dentro del sistema nervioso, y en muchos casos resulta intenso y con brotes punzantes, opresivos y siempre irritantes. Suele afectar más a las zonas musculares y tendinosas que a las articulares, ya que estas primeras presentan más receptores nerviosos. También puede presentarse rigidez, contracturas e incluso pérdida de fuerza y atrofia muscular. En casos más severos se combina este dolor con el dolor articular de la artrosis y puede ser invalidante, así como puede provocar también cefaleas y migrañas.
2. Fatiga: este es el síntoma más polémico del síndrome de sensibilización central y resulta también uno de los más comunes en estas patologías. Se trata de una fatiga neurocognitiva que afecta al paciente sin que mejore tras el descanso y puede llegar a ser incapacitante: por ejemplo, puede olvidar cosas cotidianas como dónde aparcó su coche o le impide leer, ver una película o concentrarse.
3. Trastornos del sueño y la temperatura: los reguladores de los sistemas de sueño, presión y temperatura se controlan desde el sistema nervioso central. Así, el paciente presentará alteraciones en el ritmo del sueño como insomnio o sueño no reparador, además que puede despertarse constantemente por el dolor. Por otra parte, es habitual que estos pacientes sientan frío o calor repentinamente sin responder a la climatología real, así como presentan fiebre con facilidad.
4. Síndrome seco: se constituye principalmente por sequedad ocular y picor de ojos, sequedad de la boca y puede afectar a otras mucosas como la nariz o los genitales, con enrojecimiento e irritación de la piel.
5. Problemas visuales: los pacientes suelen presentar presbicia o fatiga visual, a veces a consecuencia del síndrome seco, así como fotofobia y visión borrosa.
6. Problemas auditivos: los acúfenos se consideran también una patología del sistema de sensibilización central, y suelen cursar en estos pacientes además de la fonofobia o molestia ante el ruido superior a la media.
7. Síntomas neurodegenerativos: los pacientes con sensibilidad central también presentan vértigo e inestabilidad. En algunos casos pueden presentar también dishidrosis, síndrome del colon irritable, vejiga irritable o dismenorrea.
8. Síntomas endocrinológicos: por último, los cambios de peso inexplicables son comunes en la sensibilización central, pues provoca en muchos casos alteraciones de hipotiroidismo o hipertiroidismo.