Nuevas combinaciones de quimioterapia: avances y futuro

La Oncología ha cambiado de forma radical en los últimos 20 años. Hasta principios del año 2000 lo único de lo que disponíamos para tratar los distintos tipos de cáncer era la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia. Con el avance en el conocimiento de la biología molecular de los tumores se han desarrollado distintos tratamientos dirigidos a alteraciones moleculares concretas en lo que se denomina terapia de precisión o medicina personalizada. Esto permite tratamientos mejor tolerados y más eficaces que la quimioterapia, aunque es cierto que no todos los tumores presentan este tipo de alteraciones susceptibles de ser tratadas de forma dirigida.

Adicionalmente, en la última década se ha incorporado al arsenal terapéutico lo que se denomina “inmunoterapia”. Este tipo de fármacos son anticuerpos que se dirigen a las células de defensa para reactivarlas y que reconozcan a las células tumorales como células ajenas al cuerpo y las eliminen. Esto ha supuesto una segunda revolución en el tratamiento de muchos tipos de cáncer.

Nuevos fármacos quimioterápicos

Adicionalmente a lo comentado, existe una nueva familia de tratamientos quimioterápicos que se denominan “inmunoconjugados”, un tipo de fármacos basados anticuerpos que llevan asociadas moléculas de quimioterapia.

El anticuerpo actúa reconociendo una proteína específica de la superficie celular del tumor y entra en esa célula como una especie de “caballo de Troya” liberando la quimioterapia sólo en las células tumorales y no afectando a las células normales. Este tipo de fármacos ya son una realidad, por ejemplo para el cáncer de mama HER2 positivo, y veremos en los próximos años como se extiende el uso de más fármacos similares para otros tipos de cánceres.

Objetivos de las investigaciones

El objetivo final de la investigación en Oncología es erradicar el cáncer. Con los ensayos clínicos que realizamos – de fase 1 – probamos por primera vez en pacientes, fármacos que en el laboratorio han resultado muy eficaces. En los ensayos clínicos de fase 1 buscamos averiguar cuál es la mejor forma de administrar el fármaco, la dosis y frecuencia, así como la eficacia preliminar.

En definitiva, buscamos ser capaces de administrar tratamientos altamente efectivos y que sean tolerables para poder eliminar las células tumorales. Esto todavía no es posible en la mayoría de los cánceres metastásicos, pero es cierto que algunos pacientes ya están obteniendo unas respuestas muy duraderas, particularmente con los tratamientos dirigidos y la inmunoterapia.

¿Cómo se realizan este tipo de investigaciones y ensayos?

En nuestra unidad hacemos una valoración integral del paciente, valorando el tipo de cáncer, los tratamientos previos recibidos y las posibles patologías concomitantes. También realizamos un estudio molecular completo para poder decidir qué ensayo clínico puede ser más beneficioso para el paciente y le proponemos participar.

Si el paciente acepta, realizaríamos una serie de pruebas, analíticas completas, escáner, etc., para asegurarnos que es seguro administrar el tratamiento, y si cumple los criterios de inclusión y exclusión del ensayo comenzaríamos el tratamiento. En la actualidad llevamos más de 1.500 pacientes tratados procedentes de toda España y contamos con más de 70 ensayos clínicos de fase 1 para poder elegir el que potencialmente pueda funcionar en el paciente.