En casa por el COVID-19: ¿cómo me recupero de mi operación?
Written by:Muchos pacientes fueron intervenidos de alguna lesión traumatológica antes del confinamiento por el COVID-19. En circunstancias normales, ahora deberían estar recibiendo tratamientos de rehabilitación para recuperar la movilidad de la articulación operada, si no lo estaban haciendo ya. Sin embargo, muchos de estos servicios se han visto paralizados ahora, en plena crisis sanitaria por el coronavirus. ¿Qué pueden hacer estos pacientes para seguir recuperando la funcionalidad de la articulación y curar su lesión? El Dr. Antich Adrover, especialista en Traumatología, ofrece algunos consejos.
Algunos pacientes estaban en pleno proceso de rehabilitación antes del confinamiento, ¿podrán continuar con ello en casa?
Gracias a la telemedicina existen formatos de seguimiento de los pacientes desde casa, no solo con Fisioterapia, sino también Psicología y otros temas relativos a su patología. Aconsejamos seguimiento directo con el profesional durante las dos primeras semanas, que es cuando existe inflamación y dolor. Es vital el control de la herida para evitar complicaciones como infección o trombosis venosa profunda de la extremidad.
Antes del alta hospitalaria siempre facilitamos información de ejercicios suaves, domiciliarios. El uso de gel o crioterapia para bajar la inflamación también se recomienda. Y, en las dos semanas posteriores a la operación, debe haber un fluido contacto por e-mail o videoconferencia con el traumatólogo. El efecto del COVID-19 ha restringido la mayoría de cirugías programadas, y solo se harán las urgentes.
¿Qué ejercicios de rehabilitación se pueden hacer en casa y de qué objetos o utensilios domésticos pueden ayudarse los pacientes?
Los ejercicios isométricos de cuádriceps con una toalla enrollada debajo de la rodilla y empujar hacia abajo, como si quisiéramos aplastarla, serían algunos de los ejercicios iniciales adecuados para cualquier patología de rodilla intervenida, por ejemplo.
El uso de sistemas como el CPM (Continuous Passive Motion) sería extremadamente recomendables en la mayoría de cirugías de rodilla. Estos aparatos pueden programarse y utilizarse a demanda por el paciente, simplificando enormemente la Fisioterapia domiciliaria.
Posteriormente, a partir de la segunda o tercera semana hay que introducir ejercicios activos contra la gravedad, como el simple hecho de levantar la rodilla operada estando sentados en una silla.
¿Qué medidas de seguridad y precaución deben tomarse para no agravar la lesión?
Existen muchos tutoriales que explican cómo realizar sesiones de Fisioterapia en casa, sin poner en riesgo la cirugía realizada como, por ejemplo, www.fisioterapia-online.com.
No obstante, todos los centros de rehabilitación habituales tendrán que soportar sistemas de telefisioterapia o seguimiento a distancia en el futuro, a partir de esta crisis sanitaria por el COVID-19.
¿Qué ejercicios no pueden hacerse en casa bajo ningún concepto?
El confinamiento decretado por el estado disminuye la movilidad en el postoperatorio y, por lo tanto, muchos de los riesgos que habitualmente hay que proteger ahora no serán necesarios.
¿Podrá el paciente recuperarse bien?
La recuperación final del paciente operado de rodilla depende directamente del conocimiento claro previo a la cirugía. Esto, por supuesto, se hace con el especialista, analizando y entendiendo ambos las expectativas y los tiempos de recuperación. No creemos que la pandemia actual del COVID-19 pueda tener una gran repercusión en estos objetivos.
En resumen, con los sistemas de telemedicina se puede tener una compenetración completa con el traumatólogo y con el fisioterapeuta, lo que hace que la recuperación de la cirugía de rodilla, o de cualquier otra operación, no se vea alterada por los efectos de la pandemia actual.