Alternativas a la cirugía en caso de ciática por hernia discal
Written in association with:La hernia discal es una patología que afecta al 2% de la población. Se da sobre todo en el rango de edad de 30-50 años, y es más común en varones y en profesiones de carga física. El Doctor Morales Portillo, médico anestesista de la Unidad del Dolor, destaca que debemos superar el mito de que “las hernias de disco se curan solas”.
El doctor incide en la importancia de iniciar un buen tratamiento del dolor que permita la rehabilitación de forma precoz, ya que de esta forma mejoraremos el pronóstico de la enfermedad. Siguiendo estas recomendaciones, la mayoría de los pacientes nota una mejora de la ciática producida por una hernia discal en un plazo de entre 6 y 12 semanas.
Pese a eso, existe también existe un porcentaje del 50% de pacientes en los que la lumbociatalgia persiste durante más de un mes. El dolor puede incluso cronificar (duran más de tres meses) en 2 de cada 10 pacientes. Además, en 4 de cada 10 pacientes con hernia discal aparece ciática de forma recurrente.
Cuando el dolor se prolonga o es muy intenso, el doctor recomienda iniciar otro tipo de tratamiento para evitar la aparición de dolor crónico. Es muy importante, tal y como recuerda el doctor Morales, actuar desde el primer síntoma, ya que el dolor crónico puede derivar, en muchos casos, a la depresión, insomnio y ansiedad.
¿Cuándo se aconseja operar en caso de hernia discal?
Durante muchos años, los casos de pacientes con hernia discal que no mejoraban con la medicación pasados 3 meses eran sometidos a una operación, aun sin tener una clara compresión nerviosa.
En la actualidad, en cambio, la cirugía solo se aconseja cuando existe una clara compresión nerviosa por una hernia voluminosa que puede llegar a producir una impotencia motora (debilidad) o algún síntoma de compresión de raíces sacras (síndrome de cola de caballo). Los cirujanos son mucho más reticentes y restrictivos a la hora de aconsejar una cirugía.
Actualmente, en menos del 2% de las hernias discales la causa de la indicación de la cirugía es el dolor.
La importancia de tratar la inflamación que produce la ciática
En la mayoría de casos la verdadera causa del dolor en una hernia discal es la reacción inflamatoria que aparece como consecuencia de la rotura del disco intervertebral. Por lo tanto, el dolor de espalda y ciática pueden deberse a causas distintas a la comprensión mecánica de la raíz nerviosa. Los resultados de una cirugía en estos casos no son buenos.
La cirugía a veces es necesaria, pero no puede garantizar el existo en el control del dolor, y en algunos casos la propia cirugía puede acabar provocando mayores problemas de inflamación, fibrosis en la espalda.
Propuestas previas a la cirugía: bloqueos e infiltraciones
Como ya ha comentado el doctor, la cirugía debe reservarse para determinados casos, pero no puede ser visto como el tratamiento principal. Antes de pensar en la cirugía debemos contemplar otras posibles soluciones al problema, como por ejemplo tratamientos específicos de la unidad del dolor como son los bloqueos epidurales.
Estas técnicas pueden mejorar rápidamente el dolor y acortar el tiempo de recuperación. El número de infiltraciones que se pueden realizar en un determinado tiempo no es fijo y depende del estado de salud y la tolerancia de cada persona, aunque por llevar corticoides, hay una regla no escrita de no hacer más de 3-4 infiltraciones al año.
Infiltraciones con ozono como tratamiento del dolor
Las infiltraciones con ozono son otro de los tratamientos alternativos que interrumpen la cascada inflamatoria y reduce los niveles de citoquinas proinflamatorias.
Las infiltraciones con ozono son especialmente recomendables en casos de pacientes que no toleran los corticoides o bien necesitan someterse a infiltraciones de forma periódica, ya que pueden realizarse sin que aparezca ningún efecto secundario. El ozono ha mostrado ser más eficaz que los corticoides y los aines a largo plazo en el tratamiento del dolor en pacientes con dolor de espalda.
Existen otros tratamientos disponibles para tratar la ciática y la hernia discal sin cirugía, como la radiofrecuencia pulsada del ganglio dorsal o la descompresión discal percutánea, aunque estas técnicas merecen un artículo aparte.
El Doctor Carlos Morales concluye que es importante prestar atención a los pacientes con ciática que no responden a los tratamientos medicamentosos, y poder ofrecerles medidas que, al controlar el dolor, acortan el tiempo de recuperación y pueden evitar la necesidad de cirugía.