¿Qué es la Medicina Funcional o PNI?

La Medicina funcional y la Psiconeuroinmunología clínica son disciplinas científicas nacidas en Estados Unidos que entienden el organismo como un conjunto funcional de interacciones complejas entre el medio interno (genoma, epigenoma, metaboloma, microbioma) y el externo (entorno social y emocional, medio ambiente, hábitos tóxicos, alimentación, ejercicio, etc.), que continuamente integra estímulos neuropsicológicos y psicoemocionales traducidos a fenómenos químicos y físicos orgánicos. Aunque los orígenes son distintos (el término PNI fue acuñado y descrito por N. Cohen, inmunólogo, y R. Ader, psicólogo, en los años 80, y la Medicina funcional por los médicos generales Bland y Jones en los 90), confluyen en el enfoque de abordar los procesos de salud y enfermedad desde el entendimiento en profundidad de la Fisiología y Biología humanas con una perspectiva biopsicosocial.

Estas interacciones multidireccionales requieren de la participación fundamental de los sistemas inmune y neuroendocrino que reciben estímulos y vehiculan respuestas biológicas de las que, finalmente, dependerá la homeostasis o equilibrio del organismo, es decir, el estado de salud.

Entender los procesos de pérdida de salud o enfermedad desde una perspectiva funcional e integrativa permite plantear estrategias de abordaje orientadas al origen, las causas y los mecanismos de acción que subyacen en ella, y no únicamente desde una intención halopática aislada actuando sobre los signos y síntomas. La mayoría de las veces, solamente mediante fármacos. 

Los pilares en el tratamiento son la nutrición otromolecular (celular), vías e inductores enzimáticos y cofactores, la suplementación natural, la reeducación en cuanto a hábitos alimentarios y cotidianos y el ejercicio de mente y cuerpo. No se rechazan los tratamientos farmacológicos propuestos en el contexto de la medicina convencional, si en casos concretos así se requiere, si no que, a diferencia de la anterior en la que se suelen compartimentar o tratar los problemas de los órganos y sistemas de manera aislada, se incorporan otros abordajes para un mejor y óptimo beneficio del organismo que es entendido como un sistema estacionario en constante evolución que busca mantener un equilibrio activo y adaptarse a su entorno.

¿Por qué se realiza?

La Medicina funcional se realiza con el objetivo de comprender las causas y los procesos que llevan a la pérdida de salud o enfermedad en un individuo. Este enfoque busca profundizar en el origen y las causas de los desequilibrios funcionales y fisiológicos, en lugar de simplemente tratar los síntomas de forma aislada.

Al comprender cómo interactúan y responden entre sí nuestros órganos y sistemas, así como con el entorno en el que nos encontramos, podemos abordar la salud desde una perspectiva más holística y buscar soluciones terapéuticas efectivas.

¿En qué consiste?

La Medicina funcional adopta un abordaje terapéutico integrador, considerando diversos aspectos de la salud del individuo. Reconoce que la persona y su medio interno, que incluye las células propias, la microbiota y la genética, se desarrollan en un entorno que condiciona su equilibrio funcional en múltiples niveles. Este enfoque terapéutico se basa en evidencia científica y modelos biológicos plausibles para comprender el funcionamiento del organismo.

La Medicina funcional integra la interrelación entre los ejes funcionales del organismo, como el psicológico, neurológico, social, endocrinológico, metabólico e inmunológico. A través de una mirada transversal y dinámica sobre el modelo de salud y enfermedad, se busca restablecer la salud y el equilibrio funcional desde una perspectiva funcional y fisiológica, profundizando en las causas y el origen de los desequilibrios. Se utilizan intervenciones terapéuticas basadas en la evidencia científica y se promueve un enfoque individualizado para cada paciente.

¿Qué especialistas la tratan?

Para prepararse para la Medicina funcional, es fundamental buscar profesionales de la salud capacitados y especializados en esta disciplina.

Estos profesionales pueden incluir médicos, nutricionistas, terapeutas y otros especialistas en salud integral. Además, es importante que los pacientes sean proactivos y participen activamente en su proceso de salud y enfermedad.

Mantener una comunicación bidireccional con el profesional de la salud y proporcionar información relevante sobre el historial médico y estilo de vida es esencial para una atención personalizada y efectiva.

Cuidados durante los tratamientos de Medicina Funcional

Durante los tratamientos de Medicina funcional, es crucial seguir las pautas y recomendaciones proporcionadas por el profesional de la salud.

Estos tratamientos pueden incluir cambios en la alimentación y el estilo de vida, suplementación nutricional, manejo del estrés, terapias complementarias y otras intervenciones basadas en la evidencia científica.

Es importante ser constante y comprometido con el plan de tratamiento, y comunicar cualquier cambio o efecto secundario experimentado durante el proceso para que el profesional pueda ajustar el enfoque según sea necesario.

Alternativas a este tratamiento

Si bien la Medicina funcional es un enfoque integral y efectivo para promover la salud y el bienestar, existen otras alternativas terapéuticas más avanzadas que pueden considerarse en casos específicos. Estos pueden incluir tratamientos farmacológicos más especializados, terapias génicas, terapias celulares y otras terapias innovadoras en constante desarrollo en el campo de la medicina. La elección de alternativas depende de las necesidades y condiciones individuales, y es importante consultar con un profesional de la salud para determinar las opciones más adecuadas.

En resumen, la Medicina funcional se basa en un enfoque terapéutico integrador que considera al organismo como un sistema en constante evolución. Busca restablecer la salud y promover el equilibrio funcional a través de intervenciones basadas en la evidencia científica y modelos biológicos plausibles. Con una participación activa y responsable del paciente, la Medicina Funcional promueve una relación de comunicación bidireccional entre el profesional de la salud y el paciente, centrándose en la salud en lugar de esperar a que se establezca una enfermedad para intervenir.