¿Qué son las hormonas bioidénticas?

Hablamos de hormonas bioidénticas para referirnos a los tratamientos con hormonas que son exactamente iguales a nivel molecular a las que produce nuestro cuerpo de manera natural. De esta manera, tienen mucho menos efectos secundarios que los derivados hormonales.

Cualquier hormona que administremos, sea estrógenos, progesterona o testosterona puede ser bioidéntica. Tampoco influye la forma de administración, sea oral, vaginal, transdérmica (parches o crema) o mediante implante subcutáneo.

Sin embargo, se suele asociar la terminología de aplicación de hormonas bioidénticas para referirse al tratamiento más conocido, que es el implante subcutáneo, introducido con anestesia local en la zona elegida.
 

¿Por qué se realiza?

La colocación del implante subcutáneo con hormonas bioidénticas se realiza en pacientes que desean o necesitan una reposición hormonal por diversos motivos:

• Sintomatología: el déficit de determinada hormona produce falta de libido, insomnio, cansancio, falta de energía, irritabilidad o sofocos.
• Pacientes que prefieren este tipo de vía para administrar hormonas bioidénticas.

Esta forma de colocación subcutánea de la hormona bioidéntica se recomienda porque permite una mayor biodisponibilidad del fármaco, logrando así un efecto mejor, ya que el implante va liberando hormona directamente a la sangre mediante 4 meses hasta desaparecer.

Se trata de un tratamiento muy cómodo para la paciente y permite evitar algunas complicaciones y efectos secundarios en comparación con otras vías de administración, como la oral (evitando el paso hepático).

¿En qué consiste el implante subcutáneo de hormonas bioidénticas?

Consiste en la colocación de un implante subcutáneo con la medicación elegida, en la dosis apropiada para la paciente, elegida según sus síntomas, analítica y peso.

La grasa subcutánea de la región supraglútea externa, en la zona de la cadera, un poco por encima de la zona habitual de inyección intramuscular, es un área con suficiente grasa sana y donde habitualmente es donde quedará el implante.

Se realiza una asepsia de la zona con yodo, se inyecta anestesia local para hacer el procedimiento totalmente indoloro y seguidamente se hace una pequeña incisión para introducir un trocar específico que deja la medicación en la grasa subcutánea. La incisión es mínima por lo que es suficiente poner unos puntos de papel y un pequeño apósito.
 

Preparación para el tratamiento

No es necesaria ninguna preparación previa al tratamiento por parte de la paciente.
 

Cuidados tras la implantación

Las siguientes 48-72 horas se debe evitar la actividad física y las relaciones sexuales, para dejar que el implante se asiente correctamente y evitar el riesgo de que el cuerpo lo expulse. Sin embargo, se puede realizar vida normal.

El apósito puede retirarse en 2-3 días y los puntos se los quita también la propia paciente en el plazo de una semana.
 

Alternativas a este tratamiento

Para la sintomatología de la menopausia existen otros tratamientos hormonales más convencionales, habitualmente administrados por vía oral o en parches y cremas, así como alternativas fitoterápicas si no se desean hormonas: isoflavonas, cimicifuga, lúpulo, melatonina, agnus castus, etc.