Epistaxis

¿Qué es la epistaxis?

La epistaxis o sangrado nasal es toda hemorragia con origen en las fosas nasales.  Esta hemorragia puede estar causada por un traumatismo, irritación o sequedad del revestimiento de la nariz, rinitis alérgica, resfriados o sinusitis.

Otras causas pueden ser la obstrucción nasal, en casos de tabique desviado u objetos extraños en la nariz. En la mayoría de casos, tiene su origen en el tabique, que es el cartílago vertical que separa las cámaras nasales y está recubierto de vasos sanguíneos muy frágiles, que pueden romperse. Dicha epistaxis es fácil de frenar.

En cualquier caso, toda epistaxis requiere de ayuda médica de un especialista si persiste tras quince o veinte minutos de tratamiento, si se repite frecuentemente, si la sangre drena hacia la garganta o si se sospecha lesión en cuello o cabeza. La mejor forma de frenar la hemorragia es sentarse inclinado hacia delante y taparse las fosas nasales con los dedos, respirando por la boca. 

 

Pronóstico de la epistaxis

Normalmente, la mayoría de las hemorragias nasales suelen detenerse sin que se necesite ayuda médica en un periodo de tiempo comprendido entre quince y veinte minutos. No obstante, cuando el sangrado o la hemorragia están originados en los segmentos posteriores, es preciso acudir a un especialista para detenerla.

Estas hemorragias pueden ser peligrosas, y son comunes tras una lesión, o en ocasiones está causado por una presión alta, desórdenes nasales, arterioesclerosis, etc.

El sangrado de la nariz puede en ocasiones indicar la presencia de otro problema serio, como una alteración en la coagulación de la sangre o la presencia de un tumor nasal.

 

Síntomas de la epistaxis

El principal signo o síntoma de la epistaxis es el sangrado nasal. En un principio las epistaxis suelen ser escasa y de duración limitada. En casos de mayor gravedad, la sangre puede salir por uno de los orificios nasales y/o hacerse bilateral conforme la sangre fluye por las fosas.

Otros síntomas de la epistaxis son:

  • Sudoración.
  • Mareos.
  • Náuseas y vómitos, debidos a la deglución de sangre.
  • Taquicardia.
  • Hipotensión.

 

Pruebas médicas de la epistaxis

En el caso de que el sangrado no cese, el paciente puede necesitar una valoración urgente por parte de un especialista para controlar así este sangrado.

El objetivo de las pruebas médicas será identificar y localizar el sangrado, y para esto es habitual que se realice una rinoscopia anterior. En otras ocasiones se puede hacer una endoscopia nasal y explorar la orofaringe.

La epistaxis suele detenerse a los quince minutos, si el problema persiste
o se repite con frecuencia, es necesario acudir a un especialista

 

¿Cuáles son las causas de la epistaxis?

Existen diversas causas que pueden originar o producir una epistaxis:

  • Traumatismo nasal.
  • Desviación en el tabique nasal.
  • Malformación en el tabique.
  • El paciente se ha expuesto a componentes químicos o humos que irritan la mucosa nasal.
  • Uso de medicamentos anticoagulantes.
  • Cambios bruscos de altura.
  • Rinitis severa.
  • Hipertensión severa.

Por otro lado, existen otras causas originadas por factores externos:

 

 

¿Se puede prevenir la epistaxis?

La mejor forma para prevenir las hemorragias nasales es evitando los factores de riesgo. Estos son los siguientes:

  • El clima es muy seco.
  • El aire seco en ambientes con calefacción.
  • Angiomas en los vasos sanguíneos.
  • La nariz tiene una irregularidad o una deformidad.
  • El paciente está resfriado.
  • Sinusitis.
  • Sarcoidosis.
  • El paciente tiene una alta presión arterial.
  • El paciente toma medicamentos anticoagulantes.
  • El paciente consume cocaína.
     

A su vez, se puede hacer lo siguiente:

  • Lubricar los conductos nasales.
  • Utilizar spray salino para humedecer el interior de la nariz.
  • No tocarse la nariz ni la parte interior. Uñas cortas pueden ayudar.
  • Un aire húmedo (especialmente en las habitaciones).

 

Tratamiento de la epistaxis

La mayoría de las hemorragias de la nariz acaban deteniéndose por sí mismas sin que se necesite una ayuda externa en un periodo de en torno a un cuarto de hora. No obstante, las hemorragias nasales originadas en la parte posterior de la nariz pueden ser más graves y precisar de atención médica.

De forma autónoma, el paciente debe realizar lo siguiente:

  • Mantener la calma, sentarse e inclinarse hacia delante.
  • Apretarse la nariz.
  • No rascarse ni frotarse la nariz.
  • Evitar hacer esfuerzos, levantarse, etc.

En el caso de que el sangrado sea muy grave, se puede tratar con una cauterización, aunque antes es necesario localizar e identificar el origen y el punto por el que se está produciendo la hemorragia. El taponamiento nasal anterior es también una opción, aunque requiere la hospitalización del paciente.

Ya por último, en ocasiones es necesario realizar tratamiento quirúrgico para controlar definitivamente el sangrado. Existen tres métodos, la electrocoagulación, la ligadura arterial y la fotocoagulación láser. En todos los casos se utilizará anestesia general o sedación, y se utilizará visión a través de endoscopia.

 

¿Qué especialista trata la epistaxis?

El especialista encargado de diagnosticar y tratar la epistaxis y las hemorragias nasales es el especialista en Otorrinolargingología.

21-09-2023
Top Doctors

Epistaxis

Dr. Enric Cisa Lluís - Otorrinolaringología

Creado el: 03-02-2016

Editado el: 21-09-2023

Editado por: Mireia Frias

¿Qué es la epistaxis?

La epistaxis o sangrado nasal es toda hemorragia con origen en las fosas nasales.  Esta hemorragia puede estar causada por un traumatismo, irritación o sequedad del revestimiento de la nariz, rinitis alérgica, resfriados o sinusitis.

Otras causas pueden ser la obstrucción nasal, en casos de tabique desviado u objetos extraños en la nariz. En la mayoría de casos, tiene su origen en el tabique, que es el cartílago vertical que separa las cámaras nasales y está recubierto de vasos sanguíneos muy frágiles, que pueden romperse. Dicha epistaxis es fácil de frenar.

En cualquier caso, toda epistaxis requiere de ayuda médica de un especialista si persiste tras quince o veinte minutos de tratamiento, si se repite frecuentemente, si la sangre drena hacia la garganta o si se sospecha lesión en cuello o cabeza. La mejor forma de frenar la hemorragia es sentarse inclinado hacia delante y taparse las fosas nasales con los dedos, respirando por la boca. 

 

Pronóstico de la epistaxis

Normalmente, la mayoría de las hemorragias nasales suelen detenerse sin que se necesite ayuda médica en un periodo de tiempo comprendido entre quince y veinte minutos. No obstante, cuando el sangrado o la hemorragia están originados en los segmentos posteriores, es preciso acudir a un especialista para detenerla.

Estas hemorragias pueden ser peligrosas, y son comunes tras una lesión, o en ocasiones está causado por una presión alta, desórdenes nasales, arterioesclerosis, etc.

El sangrado de la nariz puede en ocasiones indicar la presencia de otro problema serio, como una alteración en la coagulación de la sangre o la presencia de un tumor nasal.

 

Síntomas de la epistaxis

El principal signo o síntoma de la epistaxis es el sangrado nasal. En un principio las epistaxis suelen ser escasa y de duración limitada. En casos de mayor gravedad, la sangre puede salir por uno de los orificios nasales y/o hacerse bilateral conforme la sangre fluye por las fosas.

Otros síntomas de la epistaxis son:

  • Sudoración.
  • Mareos.
  • Náuseas y vómitos, debidos a la deglución de sangre.
  • Taquicardia.
  • Hipotensión.

 

Pruebas médicas de la epistaxis

En el caso de que el sangrado no cese, el paciente puede necesitar una valoración urgente por parte de un especialista para controlar así este sangrado.

El objetivo de las pruebas médicas será identificar y localizar el sangrado, y para esto es habitual que se realice una rinoscopia anterior. En otras ocasiones se puede hacer una endoscopia nasal y explorar la orofaringe.

La epistaxis suele detenerse a los quince minutos, si el problema persiste
o se repite con frecuencia, es necesario acudir a un especialista

 

¿Cuáles son las causas de la epistaxis?

Existen diversas causas que pueden originar o producir una epistaxis:

  • Traumatismo nasal.
  • Desviación en el tabique nasal.
  • Malformación en el tabique.
  • El paciente se ha expuesto a componentes químicos o humos que irritan la mucosa nasal.
  • Uso de medicamentos anticoagulantes.
  • Cambios bruscos de altura.
  • Rinitis severa.
  • Hipertensión severa.

Por otro lado, existen otras causas originadas por factores externos:

 

 

¿Se puede prevenir la epistaxis?

La mejor forma para prevenir las hemorragias nasales es evitando los factores de riesgo. Estos son los siguientes:

  • El clima es muy seco.
  • El aire seco en ambientes con calefacción.
  • Angiomas en los vasos sanguíneos.
  • La nariz tiene una irregularidad o una deformidad.
  • El paciente está resfriado.
  • Sinusitis.
  • Sarcoidosis.
  • El paciente tiene una alta presión arterial.
  • El paciente toma medicamentos anticoagulantes.
  • El paciente consume cocaína.
     

A su vez, se puede hacer lo siguiente:

  • Lubricar los conductos nasales.
  • Utilizar spray salino para humedecer el interior de la nariz.
  • No tocarse la nariz ni la parte interior. Uñas cortas pueden ayudar.
  • Un aire húmedo (especialmente en las habitaciones).

 

Tratamiento de la epistaxis

La mayoría de las hemorragias de la nariz acaban deteniéndose por sí mismas sin que se necesite una ayuda externa en un periodo de en torno a un cuarto de hora. No obstante, las hemorragias nasales originadas en la parte posterior de la nariz pueden ser más graves y precisar de atención médica.

De forma autónoma, el paciente debe realizar lo siguiente:

  • Mantener la calma, sentarse e inclinarse hacia delante.
  • Apretarse la nariz.
  • No rascarse ni frotarse la nariz.
  • Evitar hacer esfuerzos, levantarse, etc.

En el caso de que el sangrado sea muy grave, se puede tratar con una cauterización, aunque antes es necesario localizar e identificar el origen y el punto por el que se está produciendo la hemorragia. El taponamiento nasal anterior es también una opción, aunque requiere la hospitalización del paciente.

Ya por último, en ocasiones es necesario realizar tratamiento quirúrgico para controlar definitivamente el sangrado. Existen tres métodos, la electrocoagulación, la ligadura arterial y la fotocoagulación láser. En todos los casos se utilizará anestesia general o sedación, y se utilizará visión a través de endoscopia.

 

¿Qué especialista trata la epistaxis?

El especialista encargado de diagnosticar y tratar la epistaxis y las hemorragias nasales es el especialista en Otorrinolargingología.

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