El día 31 de marzo se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Colon, uno de los más frecuentes en España y que, junto al cáncer de recto, se encuentra entre las primeras causas de mortalidad en nuestro país. Aunque la detección precoz es uno de los aspectos clave en las primeras fases del cáncer, también es importante recordar que mantener hábitos saludables a través de una alimentación rica en fibras y realizar ejercicio físico de forma moderada son otros elementos a tener en cuenta, ya que se ha demostrado que reduce el riesgo de padecer esta enfermedad.
El objetivo de este día mundial no es otro que el de concienciar de la necesidad de adoptar estos hábitos saludables, así como la importancia de su diagnóstico precoz. El cáncer de colon o recto, según su localización, afecta a más de 40.000 personas cada año y provoca cerca de 17.000 muertes al año, situándose como la segunda causa de muerte por cáncer.
Detección precoz: colonoscopia y Resonancia Magnética (RM) de recto
La colonoscopia es una de las técnicas más utilizadas para la detección del cáncer de colon, ya que permite la navegación endoluminal y la posibilidad de detectar pólipos menores de 6 mm. Esta prueba es empleada con mayor frecuencia en pacientes con antecedentes familiares, especialmente en aquellos que presentan factores de riesgo.
Por otro lado, otra de las técnicas utilizadas para la detección precoz del cáncer de colon es la Resonancia Magnética de recto. Esta prueba, validada para realizar la estadificación del carcinoma, es capaz de detectar la localización del tumor, la profundidad del mismo en la pared rectal y la presencia de ganglios locales.
Dada la importancia del diagnóstico precoz, los especialistas recomiendan someterse a la primera colonoscopia alrededor de los 45 años de edad, tanto en hombres que mujeres, ya que cada vez se están detectando más casos en personas jóvenes. Además de las pruebas diagnósticas ya indicadas, también es importante que ante cualquier sospecha se consulte con un especialista, ya su valoración determinara la necesidad de avanzar o no el estudio.
Consejos de prevención: ejercicio físico y dieta
Tal y como indicábamos al inicio de este artículo, el ejercicio físico y la alimentación son dos factores clave para reducir los factores de riesgo asociados a esta enfermedad. Se ha demostrado que las grasas saturadas se correlacionan con altas tasa de cáncer de colon, mientras que las dietas ricas en fibra presentan menos probabilidad de desarrollar la enfermedad. También está recomendado el consumo de aceite de oliva, salmón, nueves y aguacates.
Por otro lado, se debe evitar a toda costa el sedentarismo y la obesidad, favoreciendo la actividad física. Basta con dedicar 30 minutos de ejercicio moderado al día para conservar la salud cardiovascular y así reducir el riesgo de desarrollar algunos tipos de cáncer. Por último, sobra decir que hay que limitar el consumo de alcohol y tabaco, especialmente en aquellos pacientes con antecedentes familiares.
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