El mejor modo de favorecer un estado mental saludable que a su vez repercuta en el estado físico y que nos permita encontrarnos en disposición de gestionar la ansiedad es fomentar los hábitos saludables y satisfactorios con constancias pero sin que sean vividos como un suplicio sino como un placer o un premio para nuestra salud. La psicóloga Rosa Guillén Ferrer, miembro de Top Doctors, nos da un decálogo para controlar la ansiedad
Se trata de aquellas actividades que aunque en un inicio requieren cierto esfuerzo debido al estado de ánimo, cuando se es capaz de mantenerlas y ser constante uno mismo va a reparar en lo beneficioso de llevarlas a cabo y por lo tanto, en la necesidad de fomentarlas. El tema es estar entrenados o realizarlas habitualmente y no solo haber de recurrir a ellas como tabla de salvación o emergencia cuando se está mal puesto que entonces es mucho más complicado adquirir el hábito de manera satisfactoria.
Se trata de adquirir o recuperar las herramientas necesarias que propician el equilibrio emocional y en consecuencia el bienestar a todos los niveles incorporando o mejorando pautas de autocuidado en la vida cotidiana:
– Escuchar las señales corporales, fomentar la consciencia corporal en lugar de vivir centrados solo en los pensamientos.
– Respiración relajada diafragmática
– Respuesta de relajación controlada por unas señales donde una palabra o imagen se convierte en una respuesta de relajación controlada por una señal (relajación progresiva, meditación, Yoga, Tai-chi …)
– Auto-afirmaciones de manejo que sería recomendable que fueran pautadas o trabajadas por un profesional especializado para poder crear una tarjeta resumen de manejo personalizada.
– Externalización-distracción como por ejemplo prestar atención a objetos del entorno y describirlos mentalmente, o realizar actividades simples que requieran concentración ( recordar la letra de una canción o cualquier listado que se sepa de memoria, contar al revés desde 100, 99, 98…)
– Realización de deporte especialmente al aire libre (no necesariamente implica gastar dinero sino la realización de actividades como andar, bailar, pasear a la mascota…) es decir el movimiento corporal que a cada uno le sea posible y le motive.
– Mejorar la cantidad y sobretodo la calidad del descanso “higiene del sueño”,
– Realizar actividades que complazcan o llenen a cada persona. Es decir, aficiones de todo tipo que fomentan el bienestar, la creatividad, la relajación, desconexión, aprendizaje… (pintar, escribir, cocinar, fotografía, actividades manuales, bricolaje …)
– Reducir o controlar el consumo de estimulantes y determinadas sustancias (cafeína, incluidos refrescos que la contienen, teína, alcohol, …) y substituirlas por infusiones relajantes o neutras. (siempre bajo supervisión o consejo médico).
– Llevar a cabo una dieta saludable rica en vitamina B, Omega-3 y alimentos con triptófano para regular los niveles de serotonina.
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