Un estado óptimo del suelo pélvico mejora la calidad de vida del paciente
Escrito por:El suelo pélvico lo forman estructuras musculares, óseas y de tejido conjuntivo. Su funcionamiento correcto tiene que ver con la armonía en movimiento y funciones de todo el complejo abdominal, lumbar y pélvico.

¿Cuáles son los beneficios de un suelo pélvico óptimo?
- Un buen apoyo de isquiones ayuda a una postura correcta cuando estamos sentados, así como un buen estado de la zona alivia presiones sobre miembros inferiores a la hora de moverse.
- En la respiración: diafragma y suelo pélvico se mueven en sintonía, hay estructuras que los conectan y su buen estado ayuda a que fluyan correctamente los movimientos necesarios.
- En la calidad de vida: el bienestar tiene que ver con no tener dificultades ni para orinar, ni para defecar, ni para la erótica, ni para otras funciones vitales vinculadas a esta zona.
- En las funciones del suelo pélvico más analíticas como soporte y sostén de órganos, continencia, reflejos, y placer.
- En una correcta conciencia y, por tanto, movimiento de la zona: el “notar” esta zona nos hace más sensibles a percibir sus posibles dificultades y a percibir los reflejos necesarios para orinar o defecar.
- En el placer y la sensibilidad: estas sensaciones pueden ser condicionadas por temas como el tono muscular, una correcta vascularización y propiocepción adecuada.
- En las adaptaciones a los cambios de tejidos con el avance de la edad y los niveles hormonales.
- En los aparatos genitales: temas como el dolor, las dificultades de erección, vaginismos, dispareunias, dificultades en eyaculación, siempre y cuando el origen sea abarcable por la fisioterapia pueden tener solución.
La importancia de un buen diagnóstico
Cuando hay dificultades en estas áreas hay patologías abarcables desde la fisioterapia y otras que serán tratadas de forma multidisciplinar entre profesionales. Una valoración inicial siempre es necesaria para la intervención.