Terapias regenerativas para lesiones articulares y deportivas

En la actualidad existen tratamientos no quirúrgicos para la patología articular y deportiva. Son la fisioterapia y rehabilitación y las terapias basadas en la viscosuplementación, es decir, las infiltraciones con ácido hialurónico, plasma rico en plaquetas y factores de crecimiento y las terapias con células mesenquimales o células madre, que son obtenidas del hueso esponjoso o de la grasa abdominal.

¿Cuáles son los beneficios de las terapias biológicas y regenerativas?

Se trata de técnicas conservadoras, no agresivas o mínimamente invasivas quirúrgicamente. Buscan aumentar la función de una articulación y prolongar su vida útil, mejorando la calidad de vida del paciente y retrasando, o evitando, el recambio protésico.

Una de las principales ventajas de este tipo de métodos es que, presenta una limitada morbilidad, es decir, el riesgo inherente a su empleo es muy escaso. Por esta razón, se pueden aplicar en gran número de pacientes con patologías degenerativas o como coadyuvante para acelerar la recuperación de patologías traumáticas.

Por último, son terapias con procedimientos muy sencillos, no presentan casi dolor y no tienen efectos secundarios o complicaciones.
 

Los resultados de las terapias regenerativas

Este tipo de tratamiento se puede repetir en el tiempo. Es decir, el especialista en Traumatología podrá evaluar la posibilidad de aplicarlo nuevamente. Además, cuando sea necesario, siempre quedará la posibilidad de realizar el tratamiento definitivo de recambio protésico.

Como todo tratamiento, debe ser personalizado y adaptado específicamente a cada paciente, teniendo en cuenta su historia clínica, sus características físicas, deportivas y laborales.