Terapia fotodinámica: el complemento perfecto para los tratamientos dermoestéticos y capilares
La terapia fotodinámica es un tratamiento que se complementa a la perfección con múltiples tratamientos dermatológicos, estéticos y capilares. Actualmente, es una técnica muy utilizada puesto que ofrece unos resultados excelentes. Además, es una terapia sin ningún riesgo para nuestra salud, que también permite una rápida y óptima recuperación.
¿En qué consiste la terapia fotodinámica?
Es un tratamiento que se realiza con la aplicación de un ungüento sobre la piel, ya sea con textura de gel o crema, para seguidamente aplicar luz sobre la zona a tratar para favorecer la activación de la piel.
Suelen realizarse 4 sesiones de 12 minutos de duración espaciadas con 15 días de entremedio. El éxito de esta terapia viene dada porque no enrojece ni inflama la zona, así como porque se trata de una técnica completamente indolora que puede realizarse en cualquier momento del año.
¿Qué beneficios aporta esta técnica?
- La luz generada por tecnología LED envuelve toda la zona a cubrir.
- No ocasiona dolor ni efectos adversos.
- Estimula la activación de los fibroplastos.
- Aumenta la producción de colágeno y elastina.
- Aporta una mayor permeabilidad celular y de la replicación del ADN.
- Es ideal para promover la regeneración de nuestro organismo.

¿En qué tratamientos aplicamos terapia fotodinámica?
Existen varios tratamientos que mejoran su efectividad en combinación con terapia fotodinámica:
- Peelings.
- Rellenos faciales.
- Hilos tensores.
- Tratamientos láser.
- Rosácea.
- Cuperosis.
- Alopecia.
En conclusión, es un tratamiento compatible con cualquier tratamiento médico estético, que además de ser cómodo, rápido y sencillo, consigue minimizar los efectos secundarios y lograr unos resultados óptimos que satisfagan al paciente.