Síntomas, diagnóstico y tratamiento del mieloma múltiple
Escrito por:Hay dos tipos principales de mieloma múltiple: los asintomáticos, que solo necesitan vigilancia y suelen tener muy buen pronóstico, y los sintomáticos, que precisan tratamiento cuanto antes.
¿Qué es el mieloma múltiple?
El mieloma múltiple (MM) es un tumor del sistema linfático que consiste en una proliferación de las células plasmáticas, que son las que producen los anticuerpos que nos defienden de infecciones y de sustancias extrañas que pueden entrar en nuestro organismo. Representa el 10% de los tumores de la sangre y el 1% de los tumores humanos con 4-6 casos por 100.000 habitantes/año. Se estima que anualmente se diagnostican unos 40.000 nuevos casos en Europa, siendo la causa de unas 25.000 muertes anuales.
Normalmente, las células plasmáticas se encuentran en la médula ósea en una pequeña cantidad. En el mieloma múltiple aumentan en exceso, producen una inmunoglobulina anómala originando anemia y destrucción ósea a causa de una pérdida general de la densidad del hueso, además de otros síntomas.
Un grupo de células plasmáticas puede convertirse en tumorales al producir en cantidades superiores y de forma continuada e inadecuada el mismo anticuerpo o proteína, que se puede detectar en el suero y en la orina del paciente.
Síntomas del mieloma múltiple
El mieloma múltiple se manifiesta por el dolor de los huesos, que puede derivar en lesiones u osteoporosis. Puede afectar a cualquier hueso aunque es frecuente en la columna, el tórax, la cadera o las extremidades.
Otros síntomas del mieloma múltiple son el cansancio y la pérdida de apetito y de peso.
Diagnóstico del mieloma múltiple
En un principio, según los especialistas en Hematología, el mieloma múltiple se puede diagnosticar por medio de un análisis de sangre o de orina en donde se detecta la inmunoglobulina anónamal. Después debe realizarse una serie de exámenes más específicos, entre los que se encuentra uno de la médula ósea, a través de una punción aspirativa, y un estudio radiológico de todos los huesos del organismo.
Tratamiento del mieloma múltiple
En el caso de mielomas indolentes asintomáticos solo se necesita vigilancia con análisis periódicos. Por su parte, con los mielomas sintomáticos sí que se tiene realizar un tratamiento cuanto antes. Además, es necesario hidratarse, realizar ejercicio físico moderado y seguir un tratamiento farmacológico para prevenir las lesiones óseas y la osteoporosis, así como la prevención de las infecciones.
Complicaciones del mieloma múltiple
El mieloma múltiple puede ser una enfermedad de larga evolución (entre 5 y 10 años) que, aunque es de difícil curación, se puede controlar con tratamiento. Afecta sobre todo a personas mayores (alrededor de los 65 años) aunque también puede aparecer a partir de los 40. No es una enfermedad hereditaria ni tiene ninguna causa conocida o evitable.
El pronóstico del mieloma múltiple viene marcado por la respuesta al tratamiento y por la presencia o no de determinadas alteraciones genéticas. Además, depende de que aparezcan las siguientes complicaciones asociadas:
- Insuficiencia renal
- Complicaciones óseas, como las fracturas de huesos.
- Complicaciones neurológicas, debido a la compresión de la médula espinal por aplastamiento vertebral o acúmulo de las células plasmáticas.
- Hipercalcemia, es decir, cuando sale calcio del hueso a la sangre de manera abundante.
- Dolor, causado por el daño en los huesos.