¿Qué es la cirugía de la litiasis renal y para qué se utiliza?
¿Qué es la cirugía de la litiasis renal y para qué se utiliza?
La cirugía es una opción de tratamiento en los pacientes con litiasis el trayecto reno-ureteral. Los tratamientos podríamos dividirlos en tres grandes grupos.
- La actitud expectante que se reserva a los pacientes que por localización y tamaño de la litiasis puede ser expulsada sin más apoyo que tratamiento analgésico pautado.
- Luego tendríamos la litotricia extracorpórea con ondas de choque que está indicado en procesos que no son susceptibles de resolverse de manera natural y que por localización y tamaño el tratamiento puede ser eficaz y con bajo riesgo de complicaciones derivadas de la litotricia. Se realiza de manera ambulatoria.
- Y por último tendríamos los procedimientos quirúrgicos que requieren ingreso hospitalario. Tendríamos tres opciones: La cirugía por acceso endoureteral (acceso desde la vejiga al uréter y el riñón), la cirugía percutánea (acceso desde la piel al riñón) y por último la cirugía abdominal (cirugía abierta o laparoscópica).
¿Cómo es el procedimiento a seguir?
En los pacientes con sospecha de estar padeciendo un cólico renal requieren una correcta evaluación clínica (historia clínica), análisis de orina y sangre y realización de pruebas de imagen (radiografía de abdomen, ecografía e incluso si es necesario TC abdominal). Es fundamental una correcta evaluación de los síntomas, localización de la litiasis y su tamaño para un exitoso tratamiento.
¿Todos los pacientes con problemas de cálculo renal son buenos candidatos a la intervención?
Todos los pacientes en los que no se prevee que puedan expulsar la litiasis de manera espontánea pueden ser buenos candidatos a la cirugía, fundamentalmente la endourológica. Mediante esta técnica, desde la vejiga accedemos al uréter y gracias a la mejoría de los aparatos que disponemos en la actualidad se puede acceder a cualquier localización del riñón y con un láser fragmentar y eliminar cualquier litiasis sin importar la naturaleza de la misma.
Además de para tratar cálculos renales, ¿cree que en un futuro podría ser útil para desobstruir el uréter e insertar un stent ureteral?
Desde hace años ya se utiliza con este fin. Las nuevas indicaciones de estos procedimientos van dirigidos al tratamiento endoscópico de tumores de la vía urinaria superior. Esto, en alguno casos, ha supuesto un avance muy importante, por ejemplo, en pacientes con un solo riñón nos puede permitir preservar el órgano y no abocar al paciente a la extirpación del único riñón que posee.
¿Qué ventajas presenta respecto a otros tratamientos?
Las principales ventajas de los tratamientos endoscópicos es que en la inmensa mayoría de los casos se trata de un procedimiento resolutivo en el que, durante el acto quirúrgico, se elimina la litiasis. Tras el tratamiento, el paciente se evita la clínica de cólico renal por el autoexpulsivo de la piedra. Y, aunque requiere ingreso hospitalario, este no suele alargarse más de 24 h.
¿Pueden aparecer efectos secundarios o complicaciones?
Aunque son procedimientos muy seguros, como en todo acto quirúrgico no existe riesgo cero de complicaciones. Las complicaciones descritas son las habituales de cualquier procedimiento, como puede ser sangrado o infección. De manera específica podría darse daño ureteral o renal, pero la mejoría tecnológica en los últimos años, con instrumental de menor calibre y mayor calidad de imagen, ha minimizado mucho este tipo de complicaciones.