¿Qué es el bruxismo y cómo podemos controlarlo?

El bruxismo, también conocido como la enfermedad silenciosa, es una parafunción persistente que consiste en apretar y rechinar los dientes. Es habitual que ocurra mientras dormimos aunque también puede desarrollarse mientras realizamos tareas que requieren concentración, ya que la contracción muscular se realiza de forma involuntaria.

¿Qué síntomas caracteriza al bruxismo?

Algunos de los síntomas más visibles que denota la presencia de bruxismo son:

• Dientes desgastados
• Dolor de cabeza, cervicales e incluso de espalda
• Sensibilidad dental

Esta patología tiene una prevalencia del 10% entre la población adulta, aunque a raíz de la crisis económica del año 2008 se ha detectado un aumento de casos en la última década.

El bruxismo, además, se manifiesta en la cavidad oral de diversas formas siendo la más representativa el desgaste dental y las recesiones de encías que pueden incluso derivar en problemas de sensibilidad dental y un aumento de las caries. También se ha demostrado que puede provocar trastornos de la articulación temporomandibular (ATM).

¿Qué puede ocurrir si no se trata?

Existen diferentes tratamientos para el bruxismo y desde la Clínica Birbe ofrecen una diversidad de tratamientos que van desde el uso de protectores dentales, a ejercicios de relajación, evitar comer alimentos duros, dormir bien o beber mucha agua.

• Las férulas de descarga oclusales son unas placas removibles que se colocan en una de las dos arcadas para evitar el contacto entre ellas y el desgaste dental. De esta forma se consigue reducir el bruxismo, la presión y proteger los dientes.
• Fisioterapia. Otra de las opciones de tratamiento consiste en realizar ejercicios de estiramiento y masajes en los músculos del cuello, hombros y cara. Estas sesiones de masaje permiten aliviar el dolor, relajar la musculatura y proteger los dientes.
• Reconstrucción de los dientes. En aquellos casos en los que los dientes se encuentren muy desgastados se puede reconstruir la parte dental perdida mediante técnicas adhesivas de última generación mínimamente invasivas con carillas dentales en la zona de los incisivos e incrustaciones en la zona molar y premolar.

De no llevarse a cabo un tratamiento, el bruxismo puede producir los siguientes efectos:

• Fracturas en los dientes.
• Sensibilidad dental.
• Problemas musculares en la zona cervical y la espalda.
• Insomnio.

Las consecuencias del bruxismo pueden llegar a provocar graves problemas en el desarrollo de las piezas dentales así como en los músculos y huesos de la cara.

¿Se puede prevenir el bruxismo?

La visita regular al dentista determina en la mayoría de casos un diagnóstico precoz del bruxismo. Además, el hecho de estar sometido a situaciones de estrés en la vida diaria, presentar trastornos al dormir o el consumo de ciertos medicamento favorece el desarrollo y la progresión del bruxismo a estadios superiores, con lo cual es aún más necesario acudir una o dos veces al año a una revisión bucodental.

Para prevenir el bruxismo podemos seguir los siguientes consejos:

• Reducir el consumo de excitantes (cafeína, teína y taurina).
• Escuchar música relajante antes de ir a dormir.
• Reír. La risa ayuda a recudir los estados de estrés y ansiedad.

Ante el más mínimo síntoma, no dudes en acudir a la Clínica Birbe donde su equipo de profesionales evaluará tu caso de forma personalizada y establecerá el tratamiento más adecuado siendo normalmente la férula o un aparato interoclusal, la herramientas más eficaz para evitar el daño del bruxismo mientras se duerme.