Prótesis de pene: ¿cuándo y cómo emplearlas en el tratamiento de la disfunción eréctil?
Escrito por:La disfunción eréctil o impotencia está presente entre el 12 y el 19% de los varones españoles con edades comprendidas entre los 25 y los 70 años, pero en pacientes diabéticos alcanza valores del 30-50%. La edad es otro factor relacionado; se presenta en el 2% a los 40 años, 6,7% a los 50, 18,4% a los 60, 27% a los 70 y del 75% a los 80.
A parte de la edad, las causas más frecuentes son las enfermedades cardiovasculares, endocrinas, neurológicas, prostáticas, la enfermedad de Peyronie y el consumo de fármacos, tabaco y alcohol.
- El diagnóstico es fundamental. Se lleva a cabo con una adecuada historia clínica orientada a determinar su causa más probable, una exploración física general para objetivar la presencia de erección espontánea, una analítica, estudios de imagen y finalmente, neurológicos, si son necesarios.
- El tratamiento está relacionado, en primer lugar, por las causas que originan la disfunción y por el grado de severidad de la misma, siendo preciso considerar otros factores, como la eficacia, los efectos adversos del mismo, la aceptación por el paciente y su pareja, los efectos psicológicos, su posible reversibilidad y el coste económico.

Se pasa por diversas fases y según la respuesta se va avanzando:
- Primera: incluiría el adecuado control de las posibles enfermedades concomitantes, la revisión de los tratamientos farmacológicos a los que está sometido el paciente, pues en muchas ocasiones agravan la impotencia. Además de la modificación de los hábitos nocivos, como el consumo de alcohol o de tabaco, promoviendo, además, un estilo de vida saludable. En esta fase tenemos fármacos orales, tales como sildenafilo, tadalafilo y vardenafilo. Estos son muy eficaces y bien tolerados.
- Segunda: ante la escasa o nula respuesta o imposibilidad de utilizar fármacos orales incluimos el tratamiento intracavernoso con sustancias vasoactivas, como la prostaglandina E1 o alprostadilo. Otras formas de administración del alprostadilo es a través de la uretra, mediante gel o cápsula. En esta segunda etapa pueden utilizarse también los dispositivos de vacío. Se trata de un método con poca adherencia en nuestro país y poco utilizado.
- Tercera: Ante el fracaso de los tratamientos anteriores se plantea el implante de prótesis de pene en los cuerpos cavernosos.
Por tanto, sus indicaciones son:
- No respuesta al tratamiento médico vía oral o no tolerancia por sus efectos secundarios, contraindicaciones o insatisfechos.
- No respuesta o molestias a las inyecciones intracavernosas o intrauretral.
- Solución definitiva a su problema.