Preguntas frecuentes antes de una reducción mamaria

La intervención de reducción de pecho se realiza en pacientes con edades muy diversas, desde jóvenes que han desarrollado las mamas precozmente, hasta personas de edad avanzada. Todas las pacientes tienen algo en común, presentan problemas en relación con el tamaño del pecho, lo que puede derivar en otros problemas de salud o incluso de autoestima. El Dr. Javier Cerqueiro Mosquera responde a las preguntas más frecuentes en consulta antes de realizar una reducción mamaria.

¿Cuándo se puede realizar la reducción mamaria?

Los pacientes con unas mamas excesivamente grandes sufren con frecuencia dolor de espalda, hombros y en la zona mamaria. Además, lo tienen más difícil para encontrar ropa o sujetadores con los que se sientan cómodas. Asimismo, es posible que la paciente se sienta incómoda en el área social y no solamente con su aspecto físico.

¿A qué edad se puede realizar una reducción mamaria?

Como se ha mencionado anteriormente, el tamaño del pecho puede producir dolores de espalda, incluso en edades tempranas. Además, el desarrollo prematuro de las mamas puede suponer un problema social para las jóvenes. Por lo tanto, habría que consultar con un experto en Cirugía Plástica para estudiar si la paciente es una candidata para la operación. Las pacientes que se han operado lo corroboran, más del 95% se sienten muy satisfechas con la cirugía, según revisiones estadística de casos de reducción mamaria en la literatura médica dedicada a la cirugía plástica

¿En qué consiste la operación?

La reducción mamaria se realiza bajo ingreso hospitalario y la intervención puede durar entre 2 y 4 horas bajo anestesia general. Si no hay ninguna complicación, la paciente puede incluso obtener el alta médica el mismo día de la intervención. Dependiendo de la técnica utilizada, la cicatriz puede quedar:

• Alrededor del complejo areola-pezón y vertical desde la areola al pliegue submamario
• La distribución anterior con la adición de una cicatriz transversal en el pliegue submamario

Además, el Dr. Cerqueiro estudia las necesidades y las características de la paciente y, dependiendo de la edad, la anatomía y las aspiraciones de la paciente, elige una técnica u otra. Esto propicia que la interferencia con la fisiología mamaria sea la menor posible, se pueda preservar en muchos casos la sensibilidad en el pezón e incluso mantener la capacidad de lactancia.

La técnica más utilizada por el Dr. Cerqueiro es la de cicatriz vertical, en la que se evita la cicatriz debajo de la mama. En cualquier caso, la técnica que utiliza combina el diseño vertical de la cicatriz con una mamoplastia interna, por lo que la tensión exterior y el alargamiento de las cicatrices se minimizan.

Para una pequeña minoría de pacientes con una cantidad superior de tejido a reducir se suele utilizar la técnica de injerto del complejo areola-pezón. La ventaja de esta técnica es la rapidez y la desventaja es que en la mayoría de los casos hay una pérdida de sensibilidad en la zona del pezón.

¿Cómo es el postoperatorio?

Aunque la operación pueda parecer relativamente larga, el postoperatorio es rápido. Normalmente la paciente puede volver a su trabajo a la semana de la operación y a las tres semanas retomar prácticamente todas las actividades previas a la intervención. Es necesario utilizar un sujetador sin alambres de tipo deportivo durante unas 6 semanas siguientes a la operación.

¿Qué complicaciones puede haber?

Normalmente esta intervención no suele tener complicaciones. No obstante, es importante señalar que las cicatrices son inevitables, por eso hay que escoger la mejor técnica dependiendo de la anatomía de cada paciente. La sensibilidad del pezón puede verse alterada.

La mayor parte de las complicaciones tras la intervención se pueden ver asociadas con el hábito tabáquico. En el caso de que la paciente sea fumadora, debe dejarlo al menos un mes antes de la cirugía para favorecer la mayor oxigenación de los tejidos durante la curación.