Por unos cánones de belleza más saludables y justos

Poco a poco el mundo de la moda va introduciendo unos cánones de belleza más saludables y justos (sobre todo hacia el cuerpo de la mujer).

Inevitablemente la moda, los estilos de consumo, los medios de comunicación y, en definitiva, todo aquel conjunto de imágenes y prácticas culturales de nuestra sociedad tienen repercusión en la imagen interna que se crea la persona que lo recibe. Tienen repercusión en el que las personas consideramos "bueno" o "malo" y tienen repercusión en el que las personas asociamos a un peso u otro, incluso tienen repercusión en lo que deseamos y en el qué priorizamos en la vida. Por lo tanto, la moda tiene responsabilidad y quién tiene responsabilidad debe ser consecuente.
 

No es casualidad que 9 de cada 10 afectados por un Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA) sea una chica en lugar de un chico, ni es casualidad que sea más frecuente en adolescentes que en adultos.

Los especialistas en Psiquiatría Infantil y Adolescente reivindicamos que se muestre por encima de todo que la salud es prioritaria a la estética y que es ilógico que se nos persuada y que prevalezca el discurso que la salud psicológica (la satisfacción, el bienestar o la felicidad) se conseguirá a través de una dieta restrictiva, de un peso determinado o una imagen corporal concreta. Al contrario, este tipo de mensajes lo que promueven es que la salud sea secundaria, no prioritaria y que aumenten las probabilidades de desarrollar una patología de la conducta alimentaria, que es además profundamente injusta desde el momento en que estos mensajes tienen un tratamiento desigual si van dirigidos a mujeres o hombres.