Ortodoncia infantil: claves para corregir las maloclusiones desde una edad temprana

Las maloclusiones dentarias son alteraciones en la alineación de los dientes y la relación entre los maxilares superiores e inferiores. En términos simples, ocurre cuando los dientes no encajan correctamente al cerrar la boca. Este problema puede presentarse en diferentes grados, desde leves desalineaciones hasta casos severos que pueden afectar la función de masticar, hablar e incluso la estética facial.
 

En los niños, las maloclusiones pueden surgir por diversas razones, incluyendo factores genéticos, malos hábitos como el uso prolongado del chupete o chuparse el dedo, y problemas en el desarrollo de los huesos maxilares. Si no se corrigen a tiempo, estas alteraciones pueden provocar desgaste dental, caries, dificultades para hablar, y problemas digestivos debido a una masticación ineficiente. Además, pueden afectar la confianza y autoestima del niño debido a la apariencia de su sonrisa.
 

¿Cómo influyen hábitos como el uso prolongado del chupete o chuparse el dedo en las maloclusiones?

Los hábitos infantiles, como el uso prolongado del chupete o chuparse el dedo, pueden tener un impacto significativo en el desarrollo de maloclusiones dentarias. Estos comportamientos, cuando se mantienen más allá de los primeros años de vida, pueden ejercer una presión constante sobre los dientes y maxilares en desarrollo, llevando a desalineaciones dentales y problemas de mordida.
 

El uso del chupete después de los dos años o chuparse el dedo de forma constante puede empujar los dientes hacia adelante, causando una mordida abierta, donde los dientes frontales superiores no se encuentran con los inferiores al cerrar la boca. Este tipo de maloclusión no solo afecta la estética, sino que también puede interferir con la capacidad del niño para pronunciar ciertos sonidos correctamente y puede dificultar la masticación.

¿Qué tratamientos están disponibles para corregir las maloclusiones dentarias en niños?

El tratamiento de las maloclusiones dentarias en niños depende de la gravedad del problema y de la edad del niño. Las opciones de tratamiento son:
 

• Ortodoncia preventiva: este tipo de tratamiento se realiza en niños pequeños para evitar que las maloclusiones se agraven. Puede incluir la modificación de hábitos, el uso de dispositivos que guíen el crecimiento de los maxilares, o la extracción de dientes de leche que obstaculicen el correcto desarrollo dental.
• Aparatos ortodónticos: los brackets y otros aparatos ortodónticos son comunes en el tratamiento de maloclusiones más severas. Estos dispositivos corrigen la alineación de los dientes y la mordida al aplicar una presión constante sobre los dientes para moverlos a la posición correcta.
• Cirugía ortognática: en casos extremos, cuando la maloclusión es causada por una diferencia significativa en el tamaño o forma de los maxilares, puede ser necesario un tratamiento quirúrgico combinado con ortodoncia.

¿Cuándo es necesario recurrir a la ortodoncia en niños con maloclusiones?

El momento adecuado para comenzar un tratamiento de ortodoncia varía según el desarrollo dental y la gravedad de la maloclusión. Generalmente, el especialista en Odontología recomienda una evaluación ortodóntica alrededor de los 7 años, cuando los dientes permanentes comienzan a erupcionar y los huesos maxilares todavía están en desarrollo.
 

En muchos casos, comenzar el tratamiento a una edad temprana permite aprovechar el crecimiento natural del niño para guiar el desarrollo de los maxilares y los dientes, facilitando la corrección de la mordida y alineación dental con menor tiempo de tratamiento y mejores resultados.
 

¿Cuál es la duración típica de un tratamiento para maloclusiones en niños?

La duración de un tratamiento de ortodoncia para maloclusiones en niños puede variar ampliamente dependiendo de la complejidad del caso. En promedio, el tratamiento con brackets suele durar entre 18 meses y 3 años. Sin embargo, algunos casos pueden requerir menos tiempo, especialmente si se tratan de manera temprana.
 

La cooperación del niño, como mantener una buena higiene bucal y seguir las indicaciones del ortodoncista, también influye en la duración del tratamiento. El uso de retenedores después de retirar los brackets es crucial para mantener los resultados alcanzados y prevenir recaídas.

¿Cómo prevenir futuras maloclusiones después de completar un tratamiento?

Prevenir la reaparición de maloclusiones después de completar un tratamiento es fundamental para asegurar la durabilidad de los resultados. Algunas estrategias incluyen:
 

• Uso de retenedores: después de la ortodoncia, es esencial utilizar retenedores según las indicaciones del ortodoncista para mantener los dientes en su nueva posición.
• Monitoreo continuo: las visitas regulares al ortodoncista y dentista aseguran que cualquier problema incipiente sea detectado y tratado a tiempo.
• Corrección de hábitos: es importante eliminar hábitos nocivos, como chuparse el dedo, que puedan volver a afectar la alineación dental.
• Higiene bucal adecuada: mantener una buena higiene bucal es clave para evitar problemas dentales que puedan alterar la posición de los dientes.