Metástasis: cómo abordar el cáncer que se ha extendido a otros órganos
Escrito por:Hay muchos tumores que pueden eliminarse con cirugía, radioterapia, quimioterapia u otros tratamientos. Sin embargo, una vez el cáncer se extiende a otras partes del organismo y se convierte en metástasis, es más difícil de detener.
Pero, ¿qué es el cáncer metastásico?
El cáncer metastásico se da cuando las células tumorales se desprenden del tumor de origen, se extienden al torrente sanguíneo, los vasos linfáticos u otra parte del cuerpo y crean nuevos tumores.
El lugar más común para el cáncer metastásico son los ganglios linfáticos cercanos, aunque las células tumorales también suelen extenderse al cerebro, al hígado, a los pulmones y a los huesos. Por otra parte, hay algunos tipos de cáncer que tienen más posibilidades de extenderse a ciertos órganos. El melanoma, por ejemplo, que es el tipo de cáncer de piel más peligroso, tiende a diseminarse a los pulmones y al cerebro. El cáncer de próstata, en cambio, se disemina a los huesos.
Incluso una vez el cáncer ha invadido otro órgano, todavía se le conocerá por el lugar donde se ha desarrollado inicialmente. Así, un cáncer de colon que se ha extendido al hígado no será lo mismo que un cáncer de hígado primario. Se lo conocerá como metástasis hepática o cáncer hepático secundario. Asimismo, un cáncer de mama que se disemina a los pulmones se tratará como cáncer de mama y no como cáncer de pulmón. Si el tumor original en la mama responde a los medicamentos hormonales es muy probable que los tumores pulmonares con metástasis también.
¿Con qué síntomas se manifiesta el cáncer metastásico?
Los síntomas del cáncer metastásico varían según el tipo de cáncer y dónde se haya extendido. En el cáncer diseminado al cerebro los síntomas suelen ser dolor de cabeza, convulsiones y problemas de visión. En el cáncer que se ha extendido al hígado los pacientes suelen tener ictericia (color amarillento en la piel y los ojos), fatiga, pérdida de peso o apetito e hinchazón en las piernas.
En algún caso el cáncer puede extenderse después que la persona ya haya sido tratada del tumor original. Los tumores metastásicos son un tipo de cáncer que puede aparecer meses e incluso años después de los tratamientos iniciales. En otros casos los pacientes pueden no darse cuenta de que tienen cáncer hasta notar los síntomas en función de la ubicación de la metástasis.
¿Es posible tratar el cáncer metastásico?
La posibilidad de tratar el cáncer metastásico depende de su origen primario y de las zonas donde se haya propagado. La quimioterapia y la radioterapia se emplean para reducir el tumor.
¿Son las terapias dirigidas o la inmunoterapia válidas para la metástasis?
Para conocer si una terapia dirigida puede ser efectiva se debe averiguar si hay mutaciones genéticas relacionadas con el cáncer que sufre el paciente. Hay métodos para analizarlas y se trata de encontrar mutaciones específicas en tumores que pueden tratarse con fármacos dirigidos. Asimismo, hay disponibles opciones de inmunoterapia en determinados tumores. Es una medicación pensada para aumentar la respuesta inmune del organismo y así ayudarle a eliminar las células cancerosas.
¿Se puede curar el cáncer metastásico?
Según avanzan las investigaciones en nuevos tratamientos hay más probabilidad de curación en ciertos cánceres, como el cáncer de colon y el melanoma. No obstante, el tratamiento del cáncer metastásico suele ser paliativo: reducir los síntomas y mejorar la calidad de vida del paciente, pero no puede eliminar el cáncer por completo. En muchos pacientes los tratamientos paliativos permiten mantener controlada la enfermedad durante muchos años. Así, hay fármacos que permiten contener los tumores durante mucho tiempo (llegándose a convertir el cáncer como una enfermedad crónica) si el paciente es constante en su toma, pero la resistencia puede desarrollarse en algún momento.
¿Puede evitarse el cáncer metastásico?
Hasta la fecha no existen métodos que permitan prevenir que el cáncer se propague. La mejor manera de evitar que se extienda es eliminar los tumores primarios cuando todavía son pequeños, antes de que puedan migrar a otras partes del organismo. De ahí que sea tan importante el cribado del cáncer. Sin embargo, aunque se detecte el cáncer a tiempo y se elimine, puede que haya células cancerígenas que ya estén propagadas por la sangre o en los vasos linfáticos.