Los efectos psicológicos del COVID-19 en los trabajadores españoles

Los casos de trastornos de salud mental en los trabajadores han ido en aumento en los últimos meses, según confirma un estudio realizado por Miguel Ángel Vallejo, catedrático de Psicología de la UNED. La investigación realizada a una muestra de población de unas 600 personas, determina que el 33% de los encuestados ha padecido ansiedad y otro 20% un nivel de depresión que requería de tratamiento profesional.

Estos resultados no sorprenden a nadie, pero son preocupantes, puesto que es un índice bastante elevado y debe ser tenido en cuenta. Además, la incertidumbre que se ha desatado en la economía y en la sanidad del futuro próximo no ayuda para nada a que puedan reducirse estos porcentajes.

Preocupados por la salud y por la economía

No estamos acostumbrados a convivir con una incógnita tan grande como la que se nos plantea próximamente. Estábamos medianamente tranquilos con la situación laboral que teníamos y, ahora de repente, nos hemos visto obligados a lidiar con las consecuencias de esta pandemia.

Lo cierto es que hay motivos para preocuparse, pues las actividades comerciales muestran unas cifras de un 43% menor que en la misma época de 2019. Esto significa que mientras la crisis de sanidad se vaya resolviendo, la economía necesitará de mucho más tiempo para recuperar la estabilidad. Todo ello provocará en los trabajadores un aumento de síntomas como:

• Nerviosismo.
• Inquietud.
• Temor.
• Pánico.

Afectación personal y profesional

Estas situaciones pueden afectar al trabajador, tanto en el plano personal como en el profesional, afectando así a su productividad en el centro de trabajo. Por este motivo, muchas empresas están poniendo a disposición de sus trabajadores un servicio de Psicología que les ayude a afrontar esta nueva situación.

Las directrices de la OMS

La Organización Mundial de la Salud (OMS), no ha dejado pasar como inadvertida esta situación y ha anunciado que este impacto psicológico no debe ignorarse. En este sentido, ha publicado unas directrices que servirán de guía sobre aspectos de apoyo psicosocial y de salud mental en este contexto de COVID-19.

Este apoyo emocional es muy necesario para afrontar con garantías esta ‘nueva normalidad’. Con el teletrabajo a la orden del día, así como un distanciamiento social obligado y unas estrictas medidas de higiene, es como tendremos que vivir durante los próximos meses. Las reglas del juego severamente han cambiado, por lo que no está de más, facilitar la tarea de adaptación y reincorporación a sus puestos de trabajo a los trabajadores.

¿Es el teletrabajo la opción más acertada?

El teletrabajo es una realidad. Esta modalidad laboral se ha incrementado en nada más y nada menos que un 80%. A pesar de que es el trabajo del futuro y que puede comportar grandes beneficios, conviene implementarlo bien, porque de lo contrario puede ser contraproducente.

El trabajo desde casa requiere de un espacio en el que poder aislarnos completamente y dedicarle tiempo al trabajo. No obstante, si las condiciones no son las idóneas podría darse una aversión por el teletrabajo.

Por este motivo, es tan importante que en caso de tener que realizarlo acondicionar la zona de trabajo para poder realizar nuestras tareas en casa del mejor modo posible.