Las artritis: Todo lo que se necesita saber

Las enfermedades reumáticas son dolencias que afectan a estructuras del aparato locomotor, entendido como las partes del cuerpo que nos permiten movernos que no se producen a consecuencia de golpes o traumatismos. Estas estructuras son los huesos, las articulaciones, los ligamentos, las bolsas sinoviales, los músculos y los tendones.
 

Hay más de 200 enfermedades reumáticas diferentes como la artrosis, la osteoporosis, las artritis, la fibromialgia, etc. Las artritis son procesos en los que se inflaman las articulaciones mayoritariamente por mecanismos autoinmunes. Afectan aproximadamente a un 1% de la población.
 

Habitualmente la inflamación empieza en la membrana sinovial de la articulación que es una capa que recubre toda la articulación y le proporciona el líquido sinovial que actúa como lubricante. Sin embargo, en la artrosis, la enfermedad empieza en el cartílago y tiene un carácter degenerativo y menos inflamatorio.

Causas de las artritis

• Artritis postraumáticas: cualquier golpe sobre una articulación puede producir una inflamación articular.
• Artritis por microcristales: su depósito en la membrana puede provocar una artritis. El ejemplo más habitual de este tipo es la gota en la que los cristales son el ácido úrico.
• Artritis Infecciosas: los virus y las bacterias pueden llegar a la articulación y causar una infección.
• Artritis inmunológicas: por un mecanismo complejo y parcialmente conocido, las células de nuestras defensas provocan una inflamación de la membrana sinovial y provocan una artritis crónica. El ejemplo más frecuente de este grupo es la artritis reumatoide.

Este grupo de dolencias afecta a personas de cualquier edad, desde la infancia hasta la vejez. No obstante, suele ser más frecuente su aparición entre los 20 y los 40 años.
Los especialistas en Reumatología no evidencian que haya una relación directa entre la artritis y un factor hereditario. 

Síntomas de las artritis

•    Calor: la articulación está caliente.
•    Enrojecimiento
•    Hinchazones frecuentes con un exceso de líquido articular en su interior.
•    Dolor que habitualmente no se calma con reposo.
•    Impotencia funcional que significa dificultad o imposibilidad para mover la articulación afectada

Diagnóstico de las artritis

Para diagnosticar la artritis se tienen que considerar las características del dolor que refiere el paciente y la exploración física buscando los signos inflamatorios.
 

Para determinar su causa nos ayudamos del laboratorio y, si es posible, se analiza el líquido articular después de extraerlo porqué puede ser fundamental para diagnosticar las artritis para cristales como la gota o las artritis infecciosas.

Tratamiento de las artritis

Si la causa se conoce, se trata. Por ejemplo, en la gota se trata el exceso de ácido úrico, en las infecciosas se utiliza el antibiótico adecuado, etc. También se utilizan diferentes fármacos antinflamatorios. 
 

En las artritis autoinmunes se utilizan fármacos llamados modificadores del curso de la enfermedad y también fármacos de origen biológico.

Prevención de las artritis

No podemos prevenir las artritis con los conocimientos actuales pero probablemente en un futuro cercano las investigaciones con el genoma humano ofrecerán nuevos resultados.