Hidrodilatación para el dolor y la pérdida de movilidad del hombro
La hidrodilatación es una técnica no quirúrgica que se utiliza para el tratamiento del dolor y la pérdida de movilidad del hombro.
En el caso de que un paciente sufra dolor en el hombro o tenga limitaciones en la movilidad y la fisioterapia o los medicamentos no han sido eficaces, la hidrodilatación constituye un tratamiento alternativo, evitando así tener que pasar por el quirófano.
Está especialmente indicado en tendinitis, busilis, calcificaciones y en limitaciones de movilidad del hombro.
¿Cómo se realiza la hidrodilatación en patología de hombro?
Para realizar este tratamiento se inyectan dos anestésicos locales, un corticoide de acción retardada y una cantidad importante de suero fisiológico en el área de la lesión.
Una vez realizada la inyección, el traumatólogo realiza una movilización, rompiendo las adherencias y distendiendo los tejidos de manera que se pueda obtener el máximo rango posible de movilidad.
Generalmente, se realiza en régimen ambulatorio. En algunos casos, se requieren ingreso, pero siempre es un ingreso de pocas horas. Además, dependiendo del caso, se puede realizar guiada por radiografía o ecografía.
¿Cómo son los resultados del tratamiento?
Mediante esta técnica se pueden obtener resultados excelentes, especialmente, en aquellos casos de dolor de hombro en los que exista una limitación importante de la movilidad, lo que conocemos como hombro congelado.
Cuidados que debe seguir el paciente tras la hidrodilatación
Después de someterse a un tratamiento de hidrodilatación, el paciente debe realizar sesiones de fisioterapia con el objetivo de mantener los resultados obtenidos.