El uso de la trabeculoplastia
Escrito por:La trabeculoplastia es tratamiento que se realiza mediante láser de argón y que consiste en aplicar dicho láser en el trabéculo, la zona de filtración del ojo, con la finalidad de aumentar el flujo de salida del humor acuoso y reducir la presión intraocular.
¿En qué casos se realiza?
Este procedimiento se realiza cuando los colirios hipotensores no consiguen reducir eficazmente la presión intraocular y además el paciente no es candidato a cirugía. Los motivos pueden ser que no esté suficientemente avanzado el glaucoma o que se trata de una intervención que podría poner en riesgo la salud del paciente. Es necesario para poder aplicarse que el ángulo sea abierto y esté pigmentado lo suficiente.
¿Qué exámenes previos deben realizarse?
En primer lugar, una revisión oftalmológica completa resulta fundamental para saber de qué tipo de glaucoma estamos hablando y la fase en la que está. De este modo, se podrá escoger la técnica más adecuada en cada caso particular. En este sentido, las pruebas diagnosticas más habituales que se realizan previamente a una intervención son:
- La campimetría: consiste en el estudio del campo visual.
- La tonometría: consiste en la toma de la presión del ojo.
- La gonisoscopía: consiste en la visualización directa del ángulo iridocorneal.
- La paquimetría: consiste en medir el grosor de la córnea.
- La exploración del nervio óptico de forma directa o con pruebas automatizadas, tales como OCT o HRT.
Riesgos
Hay pacientes en los que es posible que este tratamiento no sea suficiente para controlar el glaucoma, por lo que deberán tenerse en cuenta otras opciones. Además, a pesar de que es una técnica segura y mínimamente invasiva, en ciertos casos puede provocar inflamación ocular tras su aplicación.