Dolor cervical, el problema cervical más habitual en el mundo actual

¿Qué es el dolor cervical? ¿Qué puede provocarlo?

El dolor en la región cervical es el más habitual en el mundo actual. Las tensiones musculares en la cuello y hombros tienden a repetirse y hacerse crónicas debido a nuestro estilo de vida y como consecuencia del estrés. Las contracturas y dolores mantenidas en el tiempo provocan cambios posturales como la cabeza adelantada, los hombros enrollados hacia adelante, que a su vez son fuente de nuevas tensiones y sobrecargas en toda la espalda. El sedentarismo, el exceso de horas sentados ante las pantallas de ordenador y el abuso de los teléfonos móviles, aumentan y perpetúan el problema.

¿Existe relación entre el dolor cervical, cefaleas, bruxismo y problemas mandibulares?

En muchas ocasiones se pasa por alto la relación que existe entre los problemas cervicales y las disfunciones mandibulares. Los problemas de movimiento de la mandíbula, ligados al bruxismo y a las frecuentes subluxaciones de los meniscos mandibulares hacen que la columna cervical deba adaptarse y cambiar su manera de trabajar. Muchas sobrecargas y tensiones de los músculos trapecios y de otros músculos de la región cervical y escapular se deben a estas adaptaciones consecuencia de una tensión excesiva de los músculos masticadores o de una biomecánica mandibular alterada. Con el paso del tiempo esta tensión muscular y el sufrimiento de las articulaciones puede provocar también, a través de la tensión de las fascias y de la sensibilización de ciertos nervios como es el caso del nervio trigémino, cefaleas y dolores orofaciales muy molestos.

¿Qué pruebas diagnósticas serán necesarias para conocer la relación entre el dolor cervical, cefaleas, bruxismo y problemas mandibulares?

Será necesario una valoración postural y del movimiento de cada segmento corporal; pero también una valoración global de la interacción entre las diversas partes. El cuerpo humano no funciona con independencia de sus partes, como un armario de cajones; sino como un organismo interdependiente, donde lo más interesante para obtener un buen diagnóstico es saber valorar la interacción de los movimientos y la repercusión global de estos movimientos en la postura. En ocasiones, el dolor cervical no comenzará a mejorar hasta que hayamos recuperado el movimiento mandibular, disminuido las tensiones de toda la espalda y mejorado la postura global.

¿Se puede tratar estas patologías de forma conjunta?

Se puede y se debe tratar los problemas cervicales y mandibulares de manera global y conjunta. Los tratamientos analíticos articulares son también necesarios, pero si no mejoramos el equilibrio de las cadenas musculares la mejora será parcial y con riesgo de recaída. Las técnicas de masaje sobre los músculos tensos también son muy útiles, pero si no hay detrás un trabajo de reeducación postural personalizado serán insuficientes para conseguir una mejora a largo plazo. Los ejercicios activos también son muy beneficiosos para mantener la buena actividad muscular, pero si no se realizan controlando las compensaciones a distancia pierden gran parte de su eficacia. En definitiva, en la Fisioterapia global individualizada nos ayudamos de todas estas técnicas, pero siempre con una adaptación a cada persona y con una visión global. Buscamos mejorar los síntomas, pero también evitar las recaídas y prevenir nuevas lesiones.