¿Cómo afrontar el suicidio de un ser querido?

El suicidio es una de las causas de muerte más importantes en nuestro país, pero también a nivel mundial. Las causas por las que ciertas personas se suicidan pueden ser muy diversas, desde una enfermedad, porque tienen miedo a quién sabe qué, porque creen que son una carga para su familia, etc.

Pero sus hijos, nietos, hermanos..., quizá tampoco saben cómo digerir una situación como esta. ¿Qué deben de pensar...? ¿En qué hemos fallado...? ¿Hubiésemos podido hacer algo... y que no hemos hecho...? o ¿Somos culpables...? son solo algunas de las muchas preguntas que pasan por la cabeza cuando un ser querido nos abandona de esta manea.

Son tantas las preguntas y tan pocas las respuestas que al final solo dejan desconsuelo, dolor y temor a quien se las hace. Cuesta tanto realmente entender qué ha podido pasar. El duelo es el proceso por el que inexorablemente hay que pasar para digerir la situación, pero al final nos enriquecerá y nos hará más fuertes.

El duelo, cuyo sabor es tan amargo que querríamos poder apartar, pero no podemos ya que solo nos queda confiar en que todo habrá tenido un sentido y que al final, nuestro ser querido, que se ha marchado, en realidad nos quería demasiado.

Es habitual que tras la pérdida de un familiar se experimente depresión y ansiedad, pero lo realmente importante es no quedarse con los síntomas visibles que presenta el paciente sino que debemos explorar más en profundidad tanto la personalidad como las experiencias de la persona afectada.

Técnica de Neurofeedback

Podemos abordar los casos de depresión y ansiedad a través de la técnica de Neurofeedback, ya que conseguiremos que el paciente logre generar en el cerebro nuevas conexiones neuronales que den soporte a una personalidad más saludable y adaptativa, a la vez que mejoran los síntomas de ansiedad y el estado de ánimo.