Cáncer de páncreas: todo lo que debería saber

El páncreas es un órgano perteneciente al sistema digestivo cuyas funciones tienen que ver con el proceso digestivo. Como tal, su función es la de secretar enzimas y sustancias necesarias tanto para digerir como para absorber los nutrientes de los alimentos, así como generar hormonas como por ejemplo la insulina o el glucagón, encargados de regular la cantidad de glucosa en la sangre. Este cáncer consiste en una formación de células de tipo maligno en los tejidos del páncreas.

Signos y síntomas del cáncer de páncreas

Por regla general, los síntomas del cáncer de páncreas no son detectados hasta que esta se encuentra en una fase avanzada de la enfermedad. De la misma manera, padecer estos síntomas no implica que se padezca el cáncer de páncreas, por lo que el diagnóstico debe ser ofrecido por parte de un especialista.
 

No obstante, los síntomas principales del cáncer de páncreas son:

• Ictericia: el tono de la piel y de los ojos es amarillento.
   
• Pérdida de peso: la absorción de los nutrientes no se realiza correctamente. Puede acompañarse de falta de apetito y alteraciones intestinales.
   
• Dolor abdominal: suele darse en la parte superior del abdomen, y los episodios más agudos se dan al haber comido y estar acostado.
   
• Orina de tono oscuro y heces de color de arcilla: se produce una obstrucción del conducto biliar que impide su eliminación. Su retención hace que aumente la bilirrubina, que produce el cambio de color.
   
• Digestiones pesadas
   
• Pancreatitis
   
• Náuseas y vómitos: en el caso de que el tumor se sitúe en la parte superior del páncreas, puede dar obstrucción abdominal.
   

El cáncer de páncreas es uno de los tumores malignos menos frecuentes, y su incidencia roza en 2.1% de los casos.

Factores de riesgo en el cáncer de páncreas/

• Edad: cuanta más edad, mayor riesgo
   
• Raza: en personas afroamericanas es más frecuente
   
• Dieta: alimentaciones pobres en verdura y frutas y basadas en mucha carne pueden aumentar su riesgo.
   
• Tabaco: un 30% de los casos está causado por el tabaco
   
• Obesidad: se asocia a un aumento del riesgo
   
• Profesión: los trabajadores que constantemente contacten con pesticidas o petróleo registran tasas más altas de incidencia
   
• Genética: en torno a un 10% de los casos está causado por antecedentes familiares

Diagnóstico del cáncer de páncreas

Para detectar la presencia de un tumor en el páncreas existen varias pruebas, aunque a continuación se citan las más habituales:
 

• Estudio por imagen: pruebas como la tomografía computarizada, una resonancia magnética, una ecografía o una colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.
   
• Análisis de sangre: se analiza la función hepática, los marcadores tumorales y la bilirrubina
   
• Biopsia: se analiza una muestra del órgano para detectar la presencia de un tumor

Tipos de cáncer de páncreas

En función del origen del tumor existen dos tipos, los tumores exocrinos y los tumores endocrinos.
 

• Tumores exocrinos: son los más frecuentes, representando un 95% de los casos. El tumor se desarrolla en los conductos del páncreas y son denominados adenocarcinomas ductales.
   
• Tumores endocrinos: son el 5% de todos los cánceres de páncreas. El tumor puede producir hormonas, como el vipoma, el insulinoma o el glucagonoma.

Tratamiento del cáncer de páncreas

Existen diversos tratamientos, y su decisión variará en función del estado de salud del paciente, del estadio del tumor… Los métodos principales son:

• Cirugía: se extrae total o parcialmente el páncreas en función del tamaño y de la ubicación del tumor. Se puede combinar con radioterapia y quimioterapia. Existen diversas técnicas para extirpar el tumor.
   
• Laparoscopia: se realizan pequeñas incisiones y se introduce una cámara para valorar el estado del tumor en el interior del abdomen. Si es pequeño, puede extraerse con esta técnica.
   
• Cirugía de extirpación: se extirpa tanto el órgano —ya sea parcial o totalmente— y los ganglios linfáticos adyacentes
   
• Radioterapia: se utilizan rayos X para destruir células cancerosas.
   
• Quimioterapia: se utilizan fármacos para destruir las células cancerosas.
   
• PIPAC: se trata de una novedosa técnica que se basa en aplicar quimioterapia intraperitoneal mediante aerosol y laparoscopia. Se aplica en los casos en los que no se puede aplicar quimioterapia y/o radioterapia. Actualmente está considerada como una técnica de carácter paliativo, aunque sus resultados clínicos son muy esperanzadores ya que alarga tanto la esperanza de vida como la calidad de vida del paciente.
   

Las opciones de tratamiento varían en función de cada paciente. Para más información, consulte con un especialista.