Lucha contra el envejecimiento: una alternativa alimentaria
Escrito por:A medida que un paciente va vislumbrando los signos del envejecimiento cutáneo, busca métodos que corrijan los signos del paso de los años. A menudo los pacientes buscan tratamientos integrativos que beneficien todo el conjunto de la piel, que sean menos invasivos y preserven la salud recuperando las características de una piel saludable adaptada a su edad.
El proceso de envejecimiento puede ser modulado gracias a la suplementación adecuada y a una alimentación saludable para conseguir un atractivo natural.
Según los especialistas en Medicina estética, para mantener la estructura y el funcionamiento óptimo de la salud de la piel hay que actuar sobre los factores que aceleran prematuramente el envejecimiento, como el estilo de vida, la alimentación o el estrés.
Nutracéuticos contra el envejecimiento
La base de la alimentación de frutas y vegetales está unida a muchos beneficios, como son el declive asociado al envejecimiento e inclusive el cáncer.
Los fotoquímicos asociados a los extractos de frutas, plantas y vegetales tienen un potente efecto anti edad y anti proliferativo muy útil en el tratamiento de la salud de la piel.
Propiedades de los polifenoles
Los polifenoles son fitoquímicos antioxidantes muy beneficiosos para prevenir las enfermedades asociadas al estrés oxidativo y al envejecimiento.
Dentro de los polifenoles destacan los flavonoides, que tienen efecto antiinflamatorio, protector celular y solar. Los flavonoides se pueden encontrar en vegetales como la alcachofa o el brócoli, frutas como la fresa o la granada y bebidas como el té.
Los polifenoles son beneficiosos para la cicatrización y la protección de los capilares sanguíneos, mejorando la circulación y protegiendo el colágeno de la piel de la degradación. Además, los polifenoles del té verde disminuyen la respuesta hiperplásica, el edema epidérmico, la hipersensibilidad de contacto.
El resveratrol que se encuentra en frutos rojos, uva y cacahuetes, es un fuerte antioxidante, que actúa como un potente anti radicales libres, también tiene efectos antiinflamatorios y aumenta la longevidad celular. El resveratrol tiene efectos beneficiosos en la actividad cardiaca, inhibidor de las enzimas que degradan el colágeno (colagenasas). Asimismo, el resveratrol disminuye las arrugas de la piel y el estrés oxidativo de la piel y del organismo.
Por vía oral, el resveratrol disminuye la hiperpigmentación solar en mujeres con melasma, disminuyen el daño del efecto solar de la irradiación UV en los pacientes con cáncer de piel y también, las tres metaloproteasas que se producen con la radiación UV y que son causantes del envejecimiento de la piel por el sol.
Si se consumen altas dosis de flavonoides derivados del té y del cacao (epicatequinas /catequinas) se consigue un efecto foto protector endógeno. Además, aumentan la circulación sanguínea, la hidratación y la densidad cutáneas.
El efecto protector de los fitoestrogenos
Las isoflavonas de soja, como la genisteina, tienen un efecto estrogénico y un efecto fotoprotector sobre el daño causado por la radiación UVB. Estas promueven la síntesis de colágeno, densidad cutánea, y mejoran la inmunidad. También protegen de la degradación enzimática del colágeno.
Probióticos para mejorar la elasticidad de la piel
Los probióticos mejoran la barrera cutánea disminuyendo las pérdidas de agua y produciendo una mejora cosmética cutánea. Al mejorar la función de mejorar las barreras, también mejoran el sistema inmune y antagonizan las alteraciones inflamatorias de la dermatitis atópica.
Algunos de los alimentos que contienen probióticos son:
- Yogur
- Chocolate negro
- Chucrut
- Sopa de miso
Comprobado: alimentos que retrasan el envejecimiento
Cuando se trata de preservar el proceso de envejecimiento cutáneo, existen correlaciones entre patrones de alimentación saludable y la mejora del envejecimiento cutáneo, cascadas de glicación de las proteínas y longitud telomérico.
Existe una relación directa entre nutracéuticos orales y la capacidad de ciertas personas para resistir los factores extrínsecos del envejecimiento y mantener una apariencia juvenil. En otros casos, el aspecto deteriorado de la piel se relaciona con déficit en micronutrientes.
En general, vitamina C, E, ácidos grasos y fitonutrientes , así como una alimentación baja en calorías a base de pocos carbohidratos y grasas, son la base de la estrategia antioxidante.
La suplementación con CoQ10 Y Vitamina D son también muy importantes para un envejecimiento saludable, así como fitoestrógenos en la mujer menopaúsica.
Está demostrado que la toma sistémica de antioxidantes produce una mejora de la calidad de la piel y de las arrugas, así como la mejora de las capas profundas de la piel tanto a nivel estructural como funcional. Los antioxidantes ralentizan el proceso de envejecimiento y producen un descenso del impacto de los factores externos del envejecimiento en nuestra piel.
