Incidencia del cáncer de próstata en España
Escrito por:El cáncer de próstata es el más frecuente entre los varones españoles; en 2014 se diagnosticaron 32.641 casos.
Es la tercera causa de muerte por cáncer en el sexo masculino. En España cada año mueren aproximadamente unos 5.400 hombres (el 8,6% de todas las muertes por cáncer masculino y el 2,8 % del total de muertes entre los hombres).
Diagnóstico precoz del cáncer de próstata
El diagnóstico precoz del cáncer de próstata garantiza más del 98% de supervivencia a los 5 años. Sin embargo, si se diagnostica en estadios avanzados la mortalidad aumenta progresivamente.
Por lo tanto, nos enfrentamos a una enfermedad muy frecuente y que causa muchas muertes, sobre todo si no se diagnostica pronto. Para esto es fundamental acudir una vez al año al Urólogo y realizarse un PSA y un tacto rectal.
Tratamiento del cáncer de próstata
El cáncer de próstata se puede tratar de muchísimas formas diferentes, como la cirugía (abierta, laparoscópica o laparoscópica asistida por robot ,Da Vinci). También se puede tratar con radioterapia externa o radioterapia intersticial (braquiterapia).
Todas esas técnicas no están exentas de complicaciones, siendo las más frecuentes la impotencia y la incontinencia de orina, con tasas que pueden alcanzar hasta el 10% de los pacientes.
También existen técnicas ablativas (para tratar de quitar sólo el tumor), como la criocirugía o radiofrecuencia. Estas técnicas todavía son bastante experimentales.
Y por último también podríamos no tratar y hacer observación (en casos muy seleccionados) o vigilancia activa, si queremos evitar las posibles complicaciones de los tratamientos, que no son pocas.
¿Y si no tratamos el cáncer de próstata?
Para decidir no tratar el cáncer de próstata me parece imprescindible el consejo de un urólogo que cuente con una muy amplia experiencia (más de 24 años).
El tratamiento de esta enfermedad debe ser como realizarse un traje a medida. No es adecuado el mismo tratamiento para todos los pacientes. Depende mucho de la edad, actividad física, función sexual, del tipo de tumor, de su estadio, de su grado de agresividad (Gleason score), etc.
Elegir bien es fundamental, y de la correcta elección del tratamiento dependerá la curación de la enfermedad con el menor número de secuelas.
