¿Cómo ayuda la fisioterapia al dolor post-cáncer de mama?
Escrito por:Octubre se tiñe de rosa como mes de prevención del Cáncer de Mama. Sol García, reconocida fisioterapeuta, se suma a la campaña de prevención y erradicación de esta enfermedad que afecta a 1 de cada 8 mujeres.
Relación entre la fisioterapia y el cáncer de mama
La fisioterapia tiene un papel importante en la recuperación del cáncer de mama. 1 de cada 4 mujeres que han sido operadas de cáncer de mama desarrollan, después de la cirugía, un linfedema conocido como una hinchazón en el brazo por la acumulación anormal de líquido. Los síntomas son pesadez y endurecimiento de algunas zonas, lo que puede causar dolor.
Cuando se reconozcan los síntomas es importante acudir al fisioterapeuta para realizar un tratamiento que libere la zona. Según la AECC, solo un experto en Fisioterapia está cualificado para realizar el diagnóstico fisioterapéutico y en consecuencia, adaptar el tratamiento fisioterapéutico al caso concreto.
Tratamiento del lifedema, cicatriz
- Masaje para despegar la adherencias de la cicatriz y mejora el riego sanguíneo.
- Drenaje linfático manual específico para esta patología y el cual solo puede ser realizado por fisioterapeutas.
- Prendas de presión para mover el líquido y evitar la acumulación. Está especialmente indicado para los viajes de avión ya que esta patología puede empeorar en altitud elevada.
- Ejercicios suaves y aeróbicos para que los vasos linfáticos muevan el líquido, como por ejemplo, sevillanas.
- Kinesiotape para cuando se haya eliminado el líquido linfático y la hinchazón haya bajado. El vendaje puede llegar a aumentar la capacidad de los vasos linfáticos.
- Presoterapia mediante el aparato de elelctroterapia, que consiste en una bombas conectadas a una manga y envueltas alrededor del brazo, que se hinchan y se deshinchan por fases. Este bombeo ayuda a mover el líquido acumulado.