6 preguntas clave sobre artroscopia de hombro
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¿Qué es la artroscopia de hombro?
La artroscopia de hombro es una cirugía mínimamente invasiva que consiste en realizar pequeñas incisiones de menos de 1cm mediante una cámara introducida por un orificio de 5mm. Con el artroscópico se puede llegar a visualizar todos los rincones del hombro que la cirugía abierta no permite ver. Normalmente se realizan entre tres y cinco orificios de 5mm en cada cirugía, a través de los cuales se pasan los instrumentos accesorios para la reparación de las lesiones.
Esta técnica permite a los especialistas en traumatología: visualizar, evaluar, diagnosticar y reparar en el acto todos los daños en la articulación del hombro.
¿Cuándo se debe realizar una artroscopia de hombro?
La artroscopia de hombro se realiza principalmente para la patología del llamado manguito rotador, que son los tendones que mueven el hombro (supraespinoso, infraespinoso, bíceps, subescapular y redondo menor). Estos tendones pueden llegar a romperse tras un traumatismo por una caída, un tirón o, incluso, de forma degenerativa; ya que el manguito rotador sufre una degeneración a partir de los 40 años.
La otra gran patología por la que se realiza esta cirugía es la inestabilidad o luxación recidivante de hombro que suele reparar la llamada lesión Bankart, asociando una plicatura de la cápsula articular del hombro. Otras patologías como la luxación acromioclavicular o la fractura de clavícula a nivel distal o de parte de la cabeza del humero también pueden ser tratadas mediante esta técnica.
En otras ocasiones se realizan para algunas patologías menos frecuentes como el hombro congelado o capsulitis, Atrapamiento de los nervios (supraescapular y axilar).
¿La artroscopia de hombro conlleva algún riesgo?
La intervención quirúrgica se realiza bajo anestesia regional (Brazo), que se administra antes de la operación para dormir la zona del brazo, asociada a anestesia general mediante mascarilla para disminuir el riesgo de intubación de la tráquea. El riesgo de sufrir una infección postoperatoria es prácticamente inexistente (1 cada 10.000). Por otro lado, la posibilidad de provocar daño al músculo deltoides, que es el motor del hombro, es inexistente.
La artroscopia de hombro ofrece una gran ventaja: tiene los mismos resultados que la cirugía abierta pero SIN agredir los tejidos y los músculos, lo que supone menor daño y menor riesgo de sufrir complicaciones.
¿Cuánto se tarda en reincorporarse al trabajo tras una artroscopia de hombro?
La vuelta al mundo laboral depende de cada tipo de trabajo. Si el trabajo es en una oficina, el paciente se puede reincorporar a la semana de la operación; ya que se puede retirar o aflojar el cabestrillo para escribir en el ordenador. Las personas que tengan necesidad de conducir, han de esperar entre cuatro y seis semanas para poder hacerlo. Si por el contrario el trabajo requiere un esfuerzo físico con levantamiento de peso por encima del hombro, la reincorporación laboral puede tardar incluso hasta tres meses.
¿En qué consiste es el postoperatorio de la artroscopia de hombro?
El mismo día de la operación el paciente suele irse a casa. Aunque si la intervención se realiza por la tarde, se queda ingresado para pasar la noche en el hospital. Deberá llevar un cabestrillo por fuera de la ropa durante unas cuatro o seis semanas, según la patología.
A la semana de la intervención, se retirarán los puntos de la cirugía (entre tres y cinco puntos). Se le recetarán analgésicos calmantes para tomar durante la primera semana a fin de evitar el dolor. La artroscopia de hombro tiene mayor confort en el postoperatorio en comparación con la cirugía abierta.
En cuanto a ejercicios, conviene realizar estiramientos del codo mientras se está sentado y movilizar la muñeca y los dedos. A la semana de la operación, se enseña al paciente a practicar ejercicios de péndulo con el brazo entero para evitar la famosa y temida rigidez de hombro.
Tras someterse a una artroscopia de hombro, ¿es necesario realizar rehabilitación?
Si no se indica cabestrillo, el paciente puede realizar la rehabilitación en domicilio con una pauta que se le enseña sin necesidad de acudir a un centro de rehabilitación. Si por el contrario se le indica el uso de cabestrillo para proteger la reparación de los tejidos operados, debe iniciar la rehabilitación a la semana de la operación con movimiento pasivo del brazo deslizando la mano por encima de una mesa. Deberá iniciar la rehabilitación con un fisioterapeuta a partir de la tercera semana.
La rehabilitación se debe continuar hasta el tercer mes en un centro especializado para seguir posteriormente una pauta de potenciación de la musculatura con ejercicios en casa o bien en el gimnasio. Se aconseja acudir a la piscina debido a la comodidad del ejercicio en el agua.
